martes, 10 de agosto de 2010

36.

"Would you hate me if I don't believe you?". - Danny Jones. "Forget all you know".

36.

-Vete agarrada a Judd-me indicó Dougie mientras se situaba detrás de mí con disimulo.
Me agarré del brazo de Harry riéndome. Sí, esa podía ser una gran noche, me giré para ver su venían todos. Pero Danny se había quedado atrás hablando por teléfono. Me solté del brazo de Harry y me acerqué a él.
Jones me sonrió al verme y colgó el teléfono, me percaté de que apretaba el punto con fuerza.
-Ey-susurré mientras le abrazaba.-¿Qué ocurre?
-Georgia-dijo simplemente y se encogió de hombros.-No sé, no me coje el teléfono.
-¿Aun sigues insistiendo?-rodé los ojos, le agarré de la mano y tiré de él hacia el restaurante.-Mira, si te soy sincera, no te merece.
-No lo sé, yo la llamaba para disculparme con ella, fui muy grosero al hablarle de ese modo-suspiró frustrado y dejó que le guiase hasta el interior.
-Mira, Danny, no fuiste grosero. Ella te dejó. Y creéme, no sé por qué, pero cariño... Estás en Australia-exclamé mirandole.-Eres Danny Jones. Disfruta de la vida, que son cuatro días y dos de ellos, son noches.
Rió divertido y besó mejilla. Después fuimos hasta la mesa y nos sentamos. Dallas aun no había llegado. Se sentaron así: Tom, Harry, Dougie y Danny, y yo entre medias de Harry y Dougie, como había dicho en casa.
-Esperemos que Dallas no se retrase demasiado-comentó Tom mientras miraba hacia la puerta y luego hacia nosotros.-Es un poquito tardón...
-Joder, Tom-se quejó una voz detrás de él.-Vale que tarde algunas veces... Pero el tráfico es increíble.
Dallas sonrió abiertamente y se sentó en en la mesa, al lado de Tom. Saludó a todos y después, impresionado, me saludó a mí, alegre. Pedimos algo para cenar, y entre ideas, propuestas, y bromas, empezamos a comer. No sé cuánto tiempo estuvimos en el restaurante, pero después, a Danny se le ocurrió la maravillosa idea de irnos a alguna discoteca que no estuviese demasiado llena y que además estuviese cerca de casa.
So... Yo estaba allí, sentada en una mesa apartada de la pista de baile, viendo como un montón de chicas rodeaban a McFly. Dallas me miró divertido, él no había ido a bailar, se había cogido una copa, y estaba a mi lado.
-¿Molesta?-preguntó para después, darle un trago a su bebida.
-¿Yo? ¡Que va!-negué con la cabeza.-Son guapos, muy guapos. No es de extrañar que las chicas se les acerquen.
-Oye, Nat... ¿Tú sabes que le ha ocurrido a Danny?-miró hacia la pista de baile curioso.-Parecía algo frustrado durante la cena.
-Lo ha dejado con Georgia, a voces-me encogí de hombros.-A lo mejor está así por eso...
-No creo-Dallas sonrió levemente.-Danny y Georgia llevan mal mucho tiempo, casi desde que tú apareciste por Londres. Danny quiso dejarla y todo, pero Georgia se negó, y le amenazó diciéndole que le hundiría la carrera, que tenía los medios...
-¿Danny se quedó con ella porque Georgia le amenazó y ahora Georgia le deja a él?-rodé los ojos y me quedé pensando.
Sí, realmente, la laca afectaba a Georgia, pero en fin... Qué ibamos a hacerle. Alguien me agarró del brazo y me encontré cara a cara con Danny Jones que me miraba sonriente.
-¿Bailas, party girl?-rió divertido y me arrastró hasta la pista de baile.
-Jones, ¡¡que yo no sé bailar!!-me quejé mirándole.
-Bueh, sin problema-su brazo rodeó mi cintura y sonrió.-Yo te enseño.
Y allí estabamos, Danny y yo, riéndonos como estúpidos mientras Danny quería enseñarme a bailar, y yo le vacilaba. Claro que sabía bailar, pero era divertido ver sus intentos por enseñarme a hacerlo. Sí, muy divertido.
-Venga, deja de hacer el payaso, Jones-reí.-Vamos a la barra a por algo.
Y abriéndonos paso entre la marea de gente que se movía al ritmo de la música. Jones se ofreció o casi se obligó a sí mismo a pagarme una copa. Rodé los ojos y le dejé que pidiese lo que quisiese para ambos y que pagase. Después fuimos de vuelta hacia la mesa, donde estaban todos. Nos dejamos caer en los asientos, Dougie me miró, yo le sonreí y él besó mi cabeza.
-¿Qué has pedido Danny?-inquirió Dougie curioso quitándome la copa.
-¡¡Negrita!!-exclamó Jones riéndose.-Dáselo a la niña, anda, que la he invitado yo.
-Ems claro claro...-Dougie le pegó un trago largo a mi vaso y después me lo dió.-Sólo la invitas a ella...
Y así, entre esas tonterías y bromas, y gritos y fotos, llegó la hora de marcharse a casa, pero Dallas no tenía coche, había cogido un taxi. Tom, quién estába más o menos decente se ofreció a llevarle, pero Harry y Danny se acoplaron, diciendo que se tomarían la última en casa de Dallas, y que si luego se encontraban muy mal, se quedarían a dormir allí. Miré el reloj, las cuatro de la madrugada. Dougie al volante, y yo en el asiento trasero, tumbada y mirando el techo mientras la música sonaba por los altavoces.
-Hemos llegado-comunicó con voz aguda cuando llegamos, aparcó el coche en el garaje, salió y me ayudó a salir.
-Será mejor que durmamos-comenté cuando caí en la cama.
-Sí, duerme-rió Dougie mientras se quitaba la camiseta, después se dejó caer a mi lado.-Supongo que tendrías que ponerte el pijama o algo...
-Ay sí, el pijama-suspiré frustrada y me incorporé un poco.-No me apetece, me parece que voy a dormirme tal y como estoy.
-Bah, boba, yo me tapo la cara con la almohada y no te veo-besó mi mejilla y se metió en la cama.
Rodé los ojos, y me puse el pijama, después me tumbé a su lado, de costado acariciando su pelo.-¿Ya?
-Ajá-se giró y besó mis labios.
-¿Qué hacías tan pegadita a Danny en la discoteca?-preguntó curioso, y podría decir, que un poco molesto.
-Quería que bailase, le dije que no sabía y me dio "clases"-expliqué divertida mirándole.-¿Celoso? ¿Otra vez?
-Sólo de que estés tan cerca de Danny, sabiéndo que él te besó alguna vez, eso me pone celoso, porque podría volver a hacerlo, yo podría perderte y Danny reconquistarte-besó mis labios con tranquilidad.-Pero de momento, eres para mí.
Me abrazó, y nos quedamos dormidops.

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