viernes, 30 de julio de 2010

22.

"Don't worry, I fight dirty." All Time Low - Hello Brooklyn (L)

22.


Había pasado ya un mes desde que dejé Londres atrás y regresé a España, a cuidar a mi hermano. Alexander había mejorado mucho, asistía a rehabilitación, los puntos de su abdomen estaban curados y sólo le quedaba una fea cicatriz. Pero a él todo le quedaba sexy, yo sólo pude reír al escucharle. Podía andar gracias a la silla de ruedas o al par de muletas que le habían dado en el hospital. Todo estaba perfecto, yo había conocido a su mejor amigo, Iván, y él se había encargado de ayudarme con mi hermano cuando mis padres se marchaban de viaje. Alexander me contaba cada día una historia diferente sobre la época en la que yo había estado en Londres, todas sus tonterías, cómo ocurrió el accidente, y lo poco que recordaba sobre ello. Iván y yo le ayudabamos en todo lo que podíamos, pero muchas veces, Alexander me obligaba a descansar e Iván me sustituía. Podría decir que me agradaba poder descansar y dejar de cuidar a un hermano lesionado, pero no era así.
Quería estar con él, quería cuidarle, quería demostrarle que no estaba enfadada porque él hubiese tenido ese accidente de moto, y que no me importaba haber perdido el intercambio por él. Incluso le enseñé las conversaciones que mantenía con Aaron, el hijo de los Carter y sus amigos, y aunque no había vuelto a hablar con los chicos, no les culpaba, supuse que estarían enfadados y que además, tenían mejores cosas que hacer que comunicarse conmigo. Yo, por el momento, me estaba quedando con los mejores días de aquellos que pasé en Londres, los paseos, el London Eye.
Sí, puede ser que hubiese perdido mucho tiempo y que ese tiempo, lo pudiese haber pasado en Londres, pero me sentía mejor en Salamanca, ayudando a mi hermano. Porque eso era lo que una verdadera hermana hacía, estaba allí cuando más se necesitaba.
-Too much, too much, too much-tarareé mientras le llevaba el desayuno a Alexander a la cama.
-Buenos días, cantante-rió mientras se incorporaba con cuidado.-¿Qué me has preparado hoy?
-Tostadas con mantequilla y mermelada, café, y zumo de naranja. Además tienes unas cuantas galletas-sonreí y besé su mejilla.-Luego paso a ayudarte a vestirte, ¿o a eso puedes solo?
-Puedo solo, sí-sonrió y me revolvió el pelo.-¿A qué hora pasa Iván a por nosotros?
-Sobre las cinco de la tarde-dije mientras me levantaba de la cama.-Ya sabes que a Papá y a Mamá les va a encantar vernos en la puerta del aeropuerto.
Salí de la habitación de Alexander y me tumbé en el sofá, mirando el techo. Hacía un mes y dos semanas o más que cogí un avión hasta Londres, volver ahora a recoger a mis padres me producía una sensación de tristeza, nostalgia... Suspiré y miré mi móvil, que sobre la mesa, estaba vibrando. Lo cogí y respondí, sin mirar la pantallita.
-¿Sí?-inquirí como hacía normalmente.
-Si me hablas en español, me parece que no vamos a poder entendernos-la voz se rió y mi corazón palpitó mucho más fuerte.-¿Sigues ahí?
-Creo que estoy desvariando-murmuré limpiandome las lágrimas.
-¿Por qué?-inquirió él, siguiendome el juego. Podía imaginarmelo sonriendo.
-Porque creo que estoy hablando con Dougie Poynter-había cambiado solo una palabra, pero eso era suficiente para que yo estallase en lágrimas.
-No, soy Dougie Poynter-rió.-¿Estás llorando?
-No, no-reí torpemente y sollocé.-Es sólo que... Hace un mes que no sé de ti Dougie...
-Te fuiste-dijo suavemente.-Te hemos echado de menos y pues... Tom me ha dicho que te debe un viaje a Australia, y vamos a ir para allá en breves...
-No puedo ir-suspiré limpiandome las lágrimas.-Mi hermano ha tenido un accidente de moto, por eso tuve que volver.
-Ah, oh, vaya... ¿Y está bien?-preguntó curioso.
-Sí, sí... Hoy vuelven mis padres de un viaje, y supongo que se quedarán con ellos... ¿Dónde estáis?-pregunté. Oía mucho ruido de fans.
-Madrid-dijo feliz.-Tom dijo que él no se iba sin volver a verte, y Danny le apoyó.
-Voy a ir hoy-exclamé feliz.-¿Dónde estáis? ¿En el Palace?
-Sí, sí, ya sabes, dí que eres la prima de Judd, cómo antes-rió y yo sonreí.
-Dougie. Te quiero-dije sincera.-Mucho, muchísimo. Y hoy te veo, aunque sea lo último que haga, prometido.
-Oh, me siento halagado. Te veo hoy entonces, te quiero preciosa-ambos colgamos.
Empecé a saltar en el sofá como una estúpida. Dios, hacía tanto que no los veía... Tenía que estar estupenda.
-Alex, alex-dije entrando en su dormitorio.-Nos quedamos a dormir en el Palace, así descansan ellos y nosotros nos tomamos un día libre, voy a avisar a Iván y conseguir habitaciones.
Claro, para que descansen ellos. Reí para mí y llamé a Iván, conseguí tres habitaciones, y preparé una mochila con mi ropa, y otra con la de Alexander, después metí gominolas en mi bolso con forma de guitarra, mi móvil, mi Ipod y todo lo que necesitaría para el viaje. Me puse unos pantalones cortos, y una camiseta larga de tirantes de los Beatles.
A las cinco de la tarde, estabamos en el portal, esperando a Iván.

21.

"I'm exactly where I'm supossed to be now." - Demi Lovato. "This is me".

21.

Mi padre me llevó a casa, me duché, me cambié de ropa, cogí mi guitarra y mi Ipod y volví al hospital, donde mi hermano seguía en la cama. Había tenído un accidente de moto, bastante grave, y le tuvieron que operar de urgencia. Gracias a Dios, estaba recuperandose, lentamente, pero lo hacía. Me senté en el sillón al lado de su cama, mientras le veía dormir, parecía tan niño... Me puse los cascos del Ipod y encendí la música... Mi menté se dedicó a divagar, a pensar qué estarían haciendo los chicos...

Casa de los chicos.
11:00 AM. Londres.


-Ponlo-pidió Dougie mirando a Tom, que sostenía en su mano un sobre de color marrón. El mismo que el día anterior, Nat había dejado en el buzón de su casa.-A lo mejor es de alguna fan.
Ninguno sospechaba que era de Nat, aun a pesar de no haberla visto, suponían que seguía durmiendo.
-Danny, ven!!-gritó Harry mientras se acomodaba en el suelo.-Alguien nos ha enviado una cinta de vídeo.
Danny Jones se acomodó al lado de Harry, acababa de ducharse, porque tenía todo el pelo empapado y chorreando. Tom Fletcher le dio al play, y la cinta de video comenzó a reproducirse. Los cuatro chicos no se creían lo que estaban viendo, o se negaban a creérselo.
-Me voy-dijo la chica de la cinta de video, esa chica que en esos momentos, estaba en el hospital, cuidando de su hermano.-Ha habido problemas en España, y me necesitan allí.
Los chicos se miraban entre ellos, sin entender, sin creer que ella se hubiese ido.
-Sé que esto no es lo que habríais esperado, que pensabais que me iba a quedar más tiempo con vosotros, yo también lo pensé, chicos... Pero los problemas no se planean, y nadie viaja imaginando que mientras va a estar fuera, va a ocurrir algo grave-Nat emitió una sonrisa débil y continuó con su discurso.-Como bien dice la canción de "She Left Me". No os preocupeis, estaréis bien, no me necestais...-Suspiró algo triste.-Tom Fletcher. Podría darte un millón de razones por las que vas a continuar siendo uno de mis modelos a seguir, tu sonrisa, tu carisma, tu carecter, la facilidad con la que compones o toda esa energía que desprendes encima del escenario. Tu manera de ser me ha hecho sentirme mejor muchas veces, y tus abrazos siempre me han reconfortado, ya lo sabes. Has sido un gran amigo Fletcher, y te quiero mucho...
Tom Fletcher sonrió mirando a la pantalla de su televisor, le hubiese gustado decirle a la chiquilla esa que estaba a punto de llorar que la necesitaban, que todos la necesitaban... y que le hubiese gustado pasar más tiempo con ella, enseñarle a tocar esa canción que tantas ganas tenía Nat de aprender, le habría gustado decirle muchísimas cosas, y realmente, por esos momentos, sabía que no sería probable conseguirlo.
-Harry Judd-la chica sonrió y suspiró.-Quiero que sepas, que seguirás siendo mi primo, seguirás siendo aquel que me propone tomar leche en vez de coca-cola, y aquel que va golpeando con las baquetas todas las encimeras de la cocina cuando no tiene nada mejor que hacer. Sabes que adoro tu sonrisa, así que, por favor, Harry, no dejes de sonreír. Porque adoro tu energía, adoro que lo des todo ahí encima, que en las pelis te dediques a asustarme, o que me proponga planes absurdos... Gracias.
Harry Judd suspiró lentamente. La iba a echar de menos, eso no podría dudarlo, porque Nat, había sido la prima perfecta y además, iba a ser su hija adoptiva, y la de Tom Fletcher, eso no podía olvidarlo, se lo había prometido... Y también Tom y él se habían propuesto llevarsela a Australia con ellos en un pequeño viaje, pero ahora ella estaba de vuelta en España, por problemas, problemas que a ellos no les habían explicado, problemas que seguramente, necesitasen de su presencia mucho más que aquellos cuatro chicos que estaban sentados en el suelo de aquel salón.
-Douglas Lee Poynter-anunció Nat, y Dougie levantó la mirada del suelo, fijándola en el televisor.-Sé que esto te duele, mi niño. Yo no tenía el valor para despedirme de vosotros, no tenía el valor de ver esos ojos azules, no tendría el valor de irme si tú me abrazases y te negases a soltarme... Eres uno de los mejores amigos que he podido tener, y lo sabes. Siempre me has escuchado, me has aconsejado... Y con tus tonterías, me has hecho reír. Te quiero muchísimo Dougie, tenlo en cuenta. Y quizá algún día, cuando menos te lo esperes, estaré allí, volviendo a meterme con tus lagartos.
Dougie no pudo evitar sonreír, mientras se enjuagaba los ojos con el dorso de su mano. Le dolía, le dolía que ella misma no se lo hubiese dicho en persona, pero también entendía sus motivos, y también sabía que Nat lo estaba haciendo todo por una buena razón. Pero le hubiese gustado decirle que él si la necesitaba, que parte de si mismo se había ido con ella, porque a pesar de tener sólo diecisiete años, Nat era demasiado madura para su edad, tenía las ideas claras y siempre había dicho lo que pensaba.
-Danny Jones-el chico en cuestión miró la pantalla y después desvió la mirada.-Sonríe, joder, no me he muerto, payaso! Sigo viva, quizá a un montón de kilómetros de vosotros, de ti, vale, lo admito. Pero estoy en alguna parte de este planeta, que como otra fan cualquiera, espera impaciente a que Danny Jones, Tom Fletcher, Dougie Poynter y Harry Judd se desnuden encima del escenario en algún concierto al que asista. No quiero verte mal, no quiero veros mal. Así que sonríe, sabes que voy a estar bien, no hay de qué preocuparse. Además, Georgia y Giovanna os van a vigilar por mí, os cuidarán por mí... Quizá no debería decirtelo, pero no voy a tener otra oportunidad, porque quizá no nos volvamos a ver... Pero lo conseguiste. Y sabes a qué me refiero.-La chica de la televisión sonrió levemente de nuevo, y se enjuagó los ojos.-Portaros bien, sed felices, cumplir vuestro sueño y el de miles de fans que os siguen. Os quiero mucho.
La cinta de video había terminado. Danny Jones se quedó mirando la pantalla negra, con una débil sonrisa en sus labios, y la tristeza recorriendo su columna vertebral. No era justo que ella se marchase cuando él lo había conseguido, nada justo. Y sí, puede que pareciese una tontería, pero seguramente, pensar que ella se iba a olvidar de él, le hacia sentirse inútil. Suspiró, le hubiese gustado decirle que la quería una última vez, que tanto él como Dougie la necesitaban para sentirse bien consigo mismos. Porque tanto Dougie como Danny habían hablado de Nat un millón de veces, y ambos sabían como el otro la quería. Y no era del mismo modo, o al menos, eso habían dado a entender ambos.
-Se ha ido-determinó Dougie y suspiró.-Ya sabíamos que no iba a durar para siempre.

12:30 AM, España.
Hospital Universitario, Salamanca.

Cuando abrí los ojos, vi como Alexander me miraba divertido, aun seguía en aquella cama, pero sonreía más amenudo, y mejoraba, eso era sencillo.
-¿En qué piensas?-me preguntó mientras le observaba comer.
-Londres-reí.-Y en ti, en que estás mejorando, y en que eso es lo que importa.
-No me ha gustado fastidiarte las vacaciones, lo sabes-sonrió tristemente.-Sé que cuánto adorabas ese intercambio, y por mi culpa ahora estás en Salamanca, encerrada de nuevo.
-Cállate estúpido-exclamé riendo.-Come, si no comes, no te pondrás fuerte, y si no te pones fuerte, seguiré ganándote a la play!
Le saqué la lengua y ambos terminamos riéndo.

20.

"I'm solo, I'm ridin' solo". - Jason Derulo. "Ridin' Solo".

20.

Habíamos salido por Londres, los chicos, Giovanna, Georgia y yo. No podía decir que Georgia me cayese mal, era simpática y agradable, pero lamentablemente, no me caía la mitad de bien que Giovanna. Quizá porque la pareja que hacían Giovanna y Tom siempre había sido mi favorita, y porque lamentablemente, sentía que Georgia estaba con Danny Jones sólo porque eso la empujó al estrellato, pero yo no era nadie, absolutamente nadie para juzgarla.
Estuvimos toda la tarde hablando, paseando, y viendo como Dougie y Danny hacían el idiota por las calles de aquella preciosa ciudad. Un Starbucks, helados, London Eye... No sé, había tantísimas cosas que ver y que yo ya había visto, pero que con ellos, todo era diferente, muy diferente. Me quedé apartada del grupo cuando llamaron a mi móvil. Me paré en medio de la calle, y respondí, con una calma que era propia de mí.
En esos minutos, notaba que el mundo se me venía encima, eso era tan imposible, tan estúpido... Suspiré frustrada, notando como mis ojos luchaban por retener las lágrimas, todo era demasiado bonito, algo tenía que fallar en todo eso. Y sí, falló, de la peor forma posible, de la forma más dolorosa posible... Me limpié un par de lágrimas furtivas que quisieron cruzar mi rostro con el dorso de la manga, y caminé hasta donde estaban los chicos.
-Me voy a casa-dije mirándoles.-No me encuentro demasiado bien, creo que el helado me ha sentado mal.
-¿Quieres que te acompañemos?-inquirió Giovanna preocupada.
-No, no, Gi-sonreí agradecida.-Será mejor que coga un taxi y vosotros sigais disfrutando del día por Londres.
-Yo te acompaño-insistió Dougie.
-No-negué de nuevo.-No hace falta.
Abracé a Dougie y besé su mejilla. Me despedí del resto del mismo modo, y pedí a Georgia y a Giovanna que los vigilasen por mí. Ojalá y pudiese decirles que me ocurría realmente, pero no. No me gustaban las despedidas, sería mejor irme ya. Cogí un taxi casi enseguida, y le dí la dirección de la casa de Aaron al taxista, como media hora después, estaba delante de la casa de la familia Carter. Pagué al taxista, y entré corriendo en la casa, subí a mi cuarto, y empecé a hacer las maletas. Notaba como las lágrimas recorrían mis mejillas, y se perdían en mis labios, tenían un sabor amargo, tan amargo, que en el fondo de mí, dolían, cada una de ellas, dolía de una forma inimaginable. Conseguí un billete por internet, para ese mismo día, no podría haber tenido más suerte me parecía.
El cuarto estaba listo, vacío de todas mis cosas. Me senté delante del escritorio, y escribí una carta para la familia Carter, y una carta especial para Aaron, al menos a él, le contaría lo que había ocurrido, o quizá, algún día volvería a hablar con él. Le agradecí la guitarra, le dí formas de comunicación conmigo y después doblé las cartas, la de Aaron y la de la familia Carter.
Encendí la cámara de video de Aaron y me senté sobre mi cama, empecé a hacer la despedida para los chicos, eso era mucho mejor que plantarme delante de ellos y decirles todo lo que tenía que decirles... Pero no tenía el valor y mucho menos la fuerza necesaria para hacerlo, así que, esa sería una buena despedida, suponía.
Metí la cinta en un sobre, y llamé a un taxi, en diez minutos estarían en frente de la puerta. Salí de mi cuarto con las maletas, y entré en el dormitorio de Aaron, para dejar la carta para él sobre su cama. Después dejé la carta para la familia Carter encima de la encimera de la cocina, donde sabía que la leerían fijo. Salí de la casa, cerré la puerta con llave, y dejé las llaves metidas en el buzón de la familia. Luego caminé hasta la casa de los chicos, y metí el sobre en el buzón, de forma que asomase para que ellos supiesen que tenían que verlo. Realmente sabía que esa noche ninguno iba a ver el sobre, así que, esperaba que al día siguiente, todos estuviesen allí para verlo, o al menos, que lo viesen.
Suspiré cuando el taxi llegó, me monté y le pedí que me llevase al aeropuerto. Durante el trayecto no paré de llamar a mi madre. Pero no respondía, y mis tíos tampoco. Joder... Volví a limpiarme las lágrimas de los ojos. Pagué al taxista cuando llegamos al aeropuerto, entré casi corriendo en el edificio, facturé lo más rápido que pude, y en menos de dos horas, ya estaba esperando en la cola para que se abriesen las puertas del avión y poder subir.
Cuando me senté en el avión, sentí como si algo muy especial se quedase en Londres. Notaba que volvía a llorar, pero esa vez, ya no me importó demasiado... Me pusé el Ipod y la carpeta de McFly, oir sus voces aunque sólo fuesen por un aparatito, era muchísimo mejor que no volverles a oír nunca. Al menos me quedaba ese consuelo.
Cuando el avión aterrizó en Madrid, aun me quedaba un par de horas de viaje hasta llegar a Salamanca (N/A: Es la única ciudad que me conozco, ¿vale? ¬¬'' xD). Cogí el primer autobús que pude, y me quedé dormida en el trayecto, pero al llegar a Salamanca, a la estación de autobuses, lo que menos quisé coger fue un taxi. Bajé corriendo la cuesta de la facultad de derecho, y giré casi chocandome contra una farola. La calle estaba desierta a las doce y cuarto de la noche, y yo, con mi maleta de ruedas, la guitarra colgada al hombro, y hecha un desastre, corría por aquella calle como si mi vida dependiese de ello. Al llegar al hospital universitario, mi corazón estaba situado en mi garganta, y me faltaba la respiración. Me acerqué a recepción y pregunté por esa habitación que me había hecho volver de Londres. Cuando tuve la dirección, inmediatamente, cogí el ascensor y pulsé el botón. Recorrí el pasillo del hospital, y pude ver a mi madre, abrazando a mi padre, allí parados delante de la puerta de la habitación. De su habitación.
-Nat-sollozó mi madre abrazándome.-¿Qué haces aquí?
-Es Alex... Es mi hermano-lloré, llevaba aguantandome un buen rato, pero eso era demasiado para mí.
Mi padre me abrazó con fuerza, y yo sollocé aun con más fuerza, descargando toda mi rabia, frustración, miedo, temor, todo lo que sentía. Sabía que eso era demasiado para cualquier persona, y sabía que seguramente, mis padres lo estarían pasando peor que yo.
-Está despierto-me susurró mi padre besando mi cabeza, como hacían los chicos, allá, en Londres... Qué lejano parecía todo en esos momentos.
Yo asentí torpemente, me limpié las lágrimas con movimientos temblorosos y entré en la habitación. Sólo estaba él, tumbado en la cama, con el abdomen vendado, y la pierna izquierda escayolada. Suspiré algo más calmada, tampoco había sido tan grave a fin de cuentas. Me acerqué a la cama, y me senté a su lado, mirándole. Alexander no creía lo que veía, podía leerlo en sus ojos.
-Tú deberías estar en Londres-murmuró con voz ronca.
-Calla, idiota-conseguí decir mientras luchaba por no llorar.
-Siento haberte estropeado las vacaciones, enana-me agarró la mano.-Lo siento muchísimo.
-No ha sido culpa tuya, ¿vale?-besé su mejilla.-No me habría perdonado si hubiese seguido en Inglaterra mientras tú...
Le miré de arriba abajo, con todas esas vendas, y los puntos de su torso vendados también. Solté una risilla nerviosa, y él me miró, alzando una ceja.
-Pareces el muñeco de michelín con tanto blanco ahí puesto-reí mientras notaba como nuevas lágrimas volvían a surcar mi rostro.
-¿Ah sí?-rió conmigo, con su preciosa sonrisa.-Me alegro que te resulte tan divertido, mocosa.
-Te quiero-dije abrazándole, intentando no hacerle daño.-Te quiero mucho, muchísimo.
-Y yo-pasó sus brazos por mi espalda, reconfortándome.-Yo también te quiero, hermanita.
Sonreí de nuevo. Uno de los chicos más importantes de mi vida, estaba bien, estaba a salvo, y estaba conmigo.

lunes, 26 de julio de 2010

19.

"You're so beautiful. So damn beautiful." Akon. "Beautiful."

19.

Tocaron Room on the third floor, y después, los chicos empezaron a hablar entre ellos y Dallas les miraba algo confundido.
-¿Ocurre algo, chicos?
-No, estabamos hablado de una cosa que Danny tiene en mente-explicó Tom sonriendo.
-Bueno, pues, veamoslo-aceptó Dallas.
La música empezó a sonar, y yo les miraba abobada. Obviously. Él. Él sabía que adoraba Obviously. La estaba cantando, yo sonreí mirandoles, sí, les adoraba. Y Danny se estaba ganando todo esto a pulso.
-'Cause it's obviously, she's out of my league. I'm wasting my time 'cause she'll never be mine and I know I never will be good enough for her, no, no... Never will be good enough for her-cantó, con su voz, mirandome.
Sabía que estaba ahí, sabía que le estaba mirando, y sabía que estaba cayendo en su juego, sin frenos y encima, cuesta abajo. Y aunque yo sabía que me iba a pegar la hostia del siglo, no podía parar.
-¿Obviously?-inquirió Dallas mirándome y después mirando a los chicos.
-Sí-sonreí mirandole.-Danny sabe que esa canción me encanta...
-Bueno, es un bombazo-sonrió divertido.-Creéme. Estos chicos saben lo que hacen.
Yo asentí con la cabeza y seguí observándoles cantar, sí, eran geniales... Pero seguro que eso no se podía comparar con un concierto en vivo de McFly, sería casi imposible.
Los chicos se tomaron un descanso, y yo entré en la sala de grabación, para hablar con ellos, abracé a Danny y le agradecí que tocase la canción.
-Era una muy buena idea Nat-añadió Tom besando mi mejilla.-Ya sabes, Obviously siempre ha sido una buena canción.
-Sí, buena elección mi niña-dijo Dougie abrazándome por detrás.
-Es mi prima-bromeó Harry.-Es demasiado inteligente para vosotros.
-Eh, eh, para mí no-añadió Dougie.-Yo soy el tonto, el payaso, necesito a alguien con inteligencia a mi lado.
Reí y besé su mejilla mientras Harry negaba con la cabeza.
-Bueno, ¿y qué te ha dicho Danny para que vinieses a ver a unos aburridos como nosotros?-inquirió Harry curioso.
-Que Fletcher necesitaba mi ayuda para un listado de canciones o no sé qué-me encogí de hombros.-Nunca suelo escucharle, así que esa vez no fue diferente.
Danny fingió estar molesto y me miró, pero yo le saqué la lengua y él sólo pudo sonreír divertido.
-Esta chica está un poco loca, pero solo un poco eh-sonrió y me revolvió el pelo.-Ha venido cantando Akon medio camino, lo del atasco la desespera por lo visto.
-No si ya, la última vez que fui con vosotros en el coche, casi se queda dormida mientras hablabais-rió Tom.
-Cuando yo la llevé a casa no, Dougie se dedicó a hacerle cosquillas tooooodo el tiempo. Creo que está obsesionado con las cosquilla, no para de hacer cosquillas a todo el mundo, tiene un problema grave-exclamó Harry.
-No primo, no-reí.-Dougie es un cosquiadicto (?)-me inventé y luego reí, menuda tontería acababa de decir.
-Naah, soy Natadicto-bromeó besando mi mejilla y apretándome contra él.-Peero es sólo mía, pobre del que se atreva a mirarla-sonrió divertido y apoyó su barbilla en mi cabeza.
-Ni que Nat fuese una cría-comentó Danny, pero Dougie debió mirarle, porque hizo el gesto de callarse rápidamente.
-Bueno, yo me salgo. Vosotros acabad de tocar y después nos vamos a no sé, a dar una vuelta o algo por el estilo, ya veremos-reí.-Y podeis llamar a las novias chicos-dije refiriéndome a Danny y a Tom.-Quiero conocer a Gio, y como a Georgia apenas la conocí y eso... Bueno, sería un buen momento para hacerlo, ¿no?
-Trato hecho-dijo Tom feliz.
-Yo llamaré a Georgia, aunque no sé si ella podrá venir-Danny se encogió de hombros.
-Bueno, luego las llamais-salí de allí y me fui con Dallas de nuevo.
Y, como alguien dijo alguna vez, the show must go on.

18.

"Romeo Take me, somewhere we can be alone..." Taylor Swift. "Love Story"

18.

-Parece que esto va para largo-suspiré mientras me quitaba la cazadora y abría la ventana.-Aire.
-¿Estás bien?-inquirió Danny mirándome.
-Sí, sí, sólo que los atascos me agobian-sonreí y besé su mejilla.-Bueno, ¿y qué tal ayer con Georgia?
Sí, habría dicho "Muñeca de plástico, con un quilo de maquillaje y un litro de laca", si no fuese porque él estaba delante.
-No sé, ¿no te resulta incómodo?-me miró curioso.-Quiero decir, tú me gustas más que Georgia, pero... No sé, me resulta incómodo hablar de ella contigo.
-Sigo sin entender por qué. No somos nada Dann-le miré y me encogí de hombros.
-Eso es porque tú no quieres que seamos nada.
Atrapó mis labios en un beso lento, suave, dulce, hipnótico. Claro que me gustaba, era Danny Jones por dios, él que podía detenerme con sólo una mirada, él me estaba besando en ese instante. Apoyó su frente sobre la mía cuando se separó, sus ojos fijos en los mios, y su sonrisa.
-Pe... Pero, Danny tú no-murmuré perdida en sus ojos.
-Sh-puso un dedo sobre mis labios.-Ahora no te has negado, literalmente, no he roto ninguna de tus reglas imaginarias.
Sonrió de nuevo y volvió a besar mis labios. Se colocó bien y avanzamos unos cuantos metros. Pero seguiamos en ese estúpido atasco que tanto tiempo nos robaba.
-¿Reglas imaginarias?-conseguí decir después de cinco minutos.
-Regla uno, no besar. Regla dos, no acercarse a ti a menos de veinte centímetros. Regla tres, no hacerte sonrojar, porque no te gusta... Podría seguir así un buen rato, pero sabes a lo que me refiero-dijo y giró su rostro para sonreirme.
-Vaya...-me quedé mirándole impresionado.-Sí que me has prestado atención sí.
-Te lo dije, eres especial, conseguiste captar mi atención-sonrió alegre.-Es como esa canción de Akon...
-¿Cuál?
-When I see you, I run out of the words, to say, I wouldn't leave you, 'cause you're that type of girl, to make me stay-cantó sonriendo.
-¿Beautiful?
Sabía que canción era, una de mis mejores amigas adoraba a Akon y siempre la tenía puesta a todas horas, pero que Danny Jones me dijese eso era surrealista, y seguramente, yo fuera aun más tonta por creérme que él realmente quería estar conmigo cuando él tenía a Georgia a su entera disposición.
-Por cierto...-dijo de pronto.-¿Qué le dijiste a Georgia esta mañana? Estaba bastante molesta, y dijo algo de que tú ibas detrás de mí o algo así.
Yo reí levemente, me encogí de hombros. Esa chica estaba un poco obsesionada con que Danny era suyo y todo ese rollo, supongo que en el fondo la entendía y por eso no podía caerme mal.
-Nada, le pregunté por ti, me contestó súper borde, y le dije que colgaría y que Harry te llamaría más tarde, entonces tú me hablaste por teléfono-me encogí de hombros de nuevo. Eso era la verdad, y además, que si Georgia se picaba, no era mi culpa.
-Mmm Te creeré, Georgia suele ser un poco así cuando conoce a chicas nuevas... Pero me estuvo preguntando si tú y Dougie estabais saliendo y no sé...-se encogió de hombros.-Realmente me molestó ese comentario.
-¿Estás celoso de Dougie Poynter?-solté una carcajada.-Bueh, menuda paranoia te tienes encima Danny Jones.
Él se rió, acercó su rostro al mio y volvió a besarme, y yo no pude decir que no, así que, le respondí. Lo estaba consiguiendo, Danny Jones estaba haciendo que me empezase a enamorar de él, y eso no era posible, es más, estaba prohibido. Cuando se separó de mí, sonrió y besó mi frente.
-Eres una chica increíble-susurró en mi oído y después acarició mi mejilla y volvió a centrar la vista en la carretera, por lo visto, ya estabamos saliendo de aquel atasco.
Había sido la media hora más larga de toda mi vida. Aun notaba mi corazón a punto de salirse de mi pecho. Estúpido Jones, estúpido Londres, estúpido Intercambio...
-Espera, que te abro la puerta-me sonrió y bajó del coche, a mí me dió el tiempo justo de quitarme el cinturón y Danny me abrió la puerta, ayudandome a salir del coche.
-Subamos, te estarán esperando-le sonreí levemente y apresuré el paso hasta llegar al ascensor.
-Está bien, pero no hace falta que huyas de mí-rió y me abrazó, agarrandome de la cintura.
Comenzó a hacerme cosquillas, así que, cuando entramos en el estudio de grabación, parecíamos dos amigos picándose mutuamente. Saludé a Dougie que estaba en la puerta esperándonos. Danny fue directamente dentro a por su guitarra, y a mí, Dougie me llevó hasta una sala donde podría verles tocar.
-Son geniales, ya verás-dijo una voz detrás de mí.-Soy Dallas, amigo de los chicos.
-Natalie, su vecina-sonreí.-Lo sé, soy fan de McFly desde que sacaron su primer cd, así que... Sé que son espectaculares.
-Me alegro-Dallas pulsó un botón.-Bien chicos, vamos a cantar Room on the thrid floor, ¿vale? Tranquilos, ya sabeis como va esto.
Y el show empezó.

17.

"And my eyes, they despise you for who I am. Why don't you say so?" All Time Low. "Poppin' Champagne".

17.


-Gataaa-exclamé mirando como la gata de la familia miraba hacia la¡ ventana y maullaba ruidosamente.-Nada de pájaros entre horas, eh.
La gata me miró, bufó y se fue a la cocina meneando el rabo. Yo reí divertida, que crack era ese animal por dios.
-I'm gonna break your little heart-tarareé mientras me levantaba del sofá y entraba en la cocina.
Cogí una lata de comida de gatos y se la eché en el comedero, le eché agua y abrí la nevera para coger el brick de zumo de naranja, me eché un poco en un vaso y cogí un libro que había encima de la encimera. "La segunda vida de Bree Tanner". Salí al porche, me senté en un escalón de las escaleras de pñiedra que llevaban hasta la casa, y dejé el vaso de zumo a mi lado. Tenía planes para esa tarde, terminarme el libro. No me quedaba mucho, pero era entretenido.
Sí, esos iban a ser mis planes, digo iban, porque cierto chico de ojos azules hipnotizantes y sonrisa increíble, me obligaron a abandonarlos...
Cuando me quedaban menos de veinte páginas para acabar el libro, y me había quedado sin zumo, un coche aparcó delante de la casa, y tocó el cláxon. Cuando alcé la vista, me sorprendió ver a Danny Jones bajando del coche y apoyándose en él, mirándome sonriente.
-¿Alguien ha pedido un taxi con rumbo el estudio de grabación de McFly?-preguntó con voz divertida.
-Pues... No-reí y me levanté cogiendo el vaso de zumo.-No deberías estar aquí, los chicos te esperan en el estudio-le recordé mientras entraba en la casa y cerraba la puerta trás de mí.
Danny se quedó afuera, aun quieto, apoyado en el coche, lo pude ver desde la ventana de la cocina, dejé el vaso en el fregadero y subí a mi dormitorio, lancé el libro en la cama, y cogí mi Ipod, dinero, las llaves y escribí una pequeña nota a Aaron diciendole que estaría con los vecinos. Sí, quizá sí iba a ir al estudio. Bajé las escaleras de dos en dos al oír el timbre, y al abrir la puerta, Danny Jones sonrió y me miró de arriba abajo, tocando con sus dedos mi pelo húmedo, tardaba en secarse.
-Entonces... ¿Vienes?-inquirió sin dejar de sonreir y mirándome a los ojos.
-No tengo elección-me encogí de hombros y salí de la casa.
Cerré la puerta mientras Danny abría la puerta del copiloto para que yo entrase. Cuando me senté, él cerró la puerta, con esa sonrisa tan... Bueno, dejémoslo en que sonreía. Me puse el cinturón mientras él entraba en el coche y arrancaba. Se giró un segundo, antes de meter marcha y pisar el acelerador, me miró.
-¿Qué?-inquirí mirándole.
-No me has saludado en condiciones-me indicó divertido mientras acercaba su rostro al mio, y se señalaba la mejilla.
Yo reí levemente y besé su mejilla, él me imitó, besó mi mejilla y después arrancó, rumbo al estudio de grabación.
-¿Por qué has venido a buscarme?-pregunté mientras veía los edificios enormes de Londres aproximarse.
-Pensamos que te apetecería estar con nosotros, es decir... Te merecías vernos en acción al menos una vez...
-Sigo sin entenderte-reí y me encogí de hombros.
-Ya bueno, sabíamos que eras cortita-sonrió y lentamente el coche se detuvo a causa del tráfico.-Tom quiere hacer un "recopilatorio" de canciones, y necesitamos tu ayuda creo.
-¿Fletcher necesita mi ayuda?-sonreí ante la idea.-Entonces, haber empezado por ahí, chico listo.
-Ya, bueno, no es que yo sea muy listo, lo sabes-esta vez, él se encogió de hombros.
-¿Y qué canciones planeabais grabar para el recopilatorio?-inquirí curiosa.
-Room on the third floor, Surfer Babe... No sé, la lista la tiene Tom. ¿Cuál te gustaría que grabasemos del primer cd?-preguntó mirandome.
-Obviously-dije casi al instante.-Es preciosa.
-Mmm es una buena canción, sí-sonrió alegre.-A lo mejor Tom ya la ha incluído en la lista, cuando lleguemos, le echamos un vistazo a ver...

domingo, 25 de julio de 2010

16.

"She's got to love nobody..." - Lady Gaga. "Poker Face".

16.

Preparamos la cena, cenamos, me despedí de ellos y me fui a mi casa. Aaron estaba tirando en el sofá viendo una película así que, terminé de verla con él y después me fui casi corriendo a dormir. Tenía sueño, mucho sueño. Me puse el pijama y me tumbé en la cama, mirando el techo.
Wide away my mistake so predictable, you were fake, I was great, Nothing personal... I'm walking, who's laughing now? who's laughing, who's laughing now?
All Time Low sonando. Estiré el brazo hasta coger mi móvil, y contesté sin mirar la pantallita del móvil, pensando que sería mi madre.
-No sé si te das cuenta de que es la una de la madrugada-comenté con los ojos cerrados.
-Sí, bueno, sí me he dado cuenta-respondió su voz desde el otro lado del teléfono.
-¿Jones?-inquirí algo impresionada.-¿Puedo ayudarte en algo o es que se te han acabado los condones? Para eso llama a Dougie o a alguno de esos, que yo de eso, como no le robe a Aaron...
-Eh eh eh, no cortes-determinó Danny.-Me apetecía hablar contigo, ¿no puedo?
-No es que no puedas, Danny, es que es surrealista-expliqué acomodándome en la cama.-Además, Georgia te estará buscando. Me cae bien.
-¿Te cae bien mi novia?-dijo con voz extraña.
-Pues sí, no me ha hecho nada, Danny-me encogí de hombros y al rato me di cuenta de que él no podía ver lo que estaba haciendo.-Y te quiere.
-Lo sé-respondió molesto.-Por eso estoy con ella.
-¿Tú no la quieres?-pregunté con voz adormilada.-Mira, no me contestes. Voy a dormir Danny, que me estoy quedando medio dormida hablando contigo por teléfono, y no es plan de que tú estés hablando y yo esté durmiendo. Así que, ten una buena noche, y eso... No descanses mucho.
Colgué antes de que él pudiese decirme nada, me acomodé en la cama y terminé quedándome dormida casi al instante.

Desperté sobre las nueve de la mañana, así que me puse un chandal viejo, cogí mi Ipod y salí a correr junto con Bobby el perro. Estuvimos como una hora corriendo por la urbanización a un ritmo tranquilo, total no teníamos prisa. Había olvidado el móvil en casa de los Carter, así que, estaría incomunicada, algo que no era malo en absoluto, me tomé mi tiempo para pensar, con traquilidad. Llegué a casa, me duché, me vestí, me preparé un sandwich, y comí tranquilamente con la radio encendida. Después salí de casa y fui a la casa de los chicos. Llamé y no había nadie. Me encogí de hombros más para mí que para alguien más y me volví a la casa de los Carter, me tiré en el sofá y puse la televisión.
Wide away my mistake so predictable, you were fake, I was great, Nothing personal... I'm walking, who's laughing now? who's laughing, who's laughing now?
Móvil sonando. Lo saqué del bolsillo del pantalón, y contesté, era Dougie, lo supe en cuanto saludó con su habitual "Heeeeeeey".
-Mi niña, que lo de las clases de guitarra vamos a tener que suspenderlo-explicó.-Por lo menos para hoy, porque estamos en el estudio, y ha ocurrido algo con las canciones grabadas y todo eso, pero Tom ha dicho que sin duda otro día te da esas clases, lo ha prometido.
-No pasa nada, no pasa nada-sonreí.-¿Estáis todos? Quiero decir, los cuatro, Danny incluído.
-No, no-negó levemente.-No hemos localizado a Danny, pero tenemos que avisarle, así que, si consigues verle o hablar con él, díselo.
-Ok. Te quiero-me despedí y colgué.
Busqué rápidamente el número de Danny en la agenda y marqué la teclita de llamar. Tres pitidos después, una voz de mujer contestó algo borde al otro lado de la línea.
-¿Quién es?
-Soy Nat, la prima de Harry-dije rodando los ojos.
-¿Y qué quieres de Danny?-volvió a preguntar bordemente.
-¿Le puedes decir que se ponga?-exigí. La chica esa me tocaba la moral.
-Está duchándose. ¿Puedo ayudarte en algo?-replicó de malas maneras.
-Podrías no ser tan borde, que yo le estaba llamando para decirle algo del grupo, pero no te preocupes, ahora llamo a Harry y le digo que le llame él-bufé y fui a colgar.
-Nat, Nat-la voz de Danny me llegó desde el otro lado del teléfono.-¿Sigues ahí?
-Sí, sí-suspiré y rodé los ojos.-Dougie me ha llamado, Jones, tienes que ir al estudio, te necesitan.
-¿Y eso es todo?
-Sí, sólo llamaba para eso, no sé para que creías que te llamaba-reí levemente.
-Pues no sé... ¿Para decirme lo maravilloso que soy?-inquirió divertido.
-No sueñes Jones. He de irme.-Colgué y reí mientras centraba mi mirada en la tele.
A Danny le faltaban varios tornillos en la cabeza... Día sin chicos al parecer...

sábado, 24 de julio de 2010

15.

"Too much of anything is too much". All Time Low. "Too Much".

15.

Noté como un escalofrío recorrió mi espalda, pero lo ignoré o al menos, eso intenté. Danny y yo continuamos el trayecto en silencio, él con su brazo sobre mis hombros y yo con mi cabeza apoyada en su hombro. Notar su aliento contra mi cabello hacía que todo mi sistema nervioso se alterase, pero yo prefería ignorar eso.
Cuando llegamos a casa de los chicos, yo me separé de Danny y salí por la puerta contraria a la de Danny. En frente de la casa se encontraba una chica rubia, muy guapa, pero algo plástica para mi gusto, estaba hablando animadamente con Dougie, y cuando Danny salió del coche, ella sonrió alegre, pero al verme bajar a mí, su sonrisa cambió rápidamente. Yo caminé rápidamente hasta llegar a donde estaba Dougie, pasando mis brazos por su cintura y abrazándole.
-Hola, mi niña-saludó Dougie sujetándome por la cintura y besando mi cabeza.-¿Un trayecto algo ajetreado?
-Y tanto, mi niño, y tanto-reí y me puse de puntillas para besar su mejilla.-Danny ha venido como medio en trance todo el camino, y yo me he dedicado a tarear canciones que no conocía, ya sabes, a inventarmelas.
-Así me gusta, sí señor-rió.-Que fomentes tu imaginación.
-¿Y dóónde está mi primito guapo?-inquirí mirando a la chica, a Dougie, y al interior de la casa.
-¿Harry? Está dentro, en el salón, viendo la MTV, no sé que le ha dado con ese canal-explicó Dougie.-Ve con él.
-Espera Nat-Danny me detuvo con el sonido de su voz.-Quiero presentarte a Georgia.
Ah, que eso era Georgia. Pues nada, habría que saludar. Sonreí alegre (sí, fingidamente), caminé hasta donde ella se encontraba y le dí dos besos.
-Encantada, soy Natalie, la prima de Harry-me presenté.-Y ahora, con permiso, voy a verle.
Entré en la casa tirando de Dougie trás de mí y entramos en el salón, dónde Harry estaba viendo un videoclip de The Who. Sonreí y me tiré encima de Harry, que no nos había visto llegar.
-¿Ya has conocido a Georgia?-preguntó mirándome mientras me abrazaba con fuerza.
-Mmm sí, supongo.
-¿Supones?-inquirieron él y Dougie.
-O sea, que si esa muñeca de plástico, medio quilo de maquillaje y medio litro de Laca, se llama Georgia, entonces sí-me encogí de hombros y los dos chicos rieron.
-Que maja la niña-bromeó Dougie revolviendome el pelo.-Voy a por coca-cola, ¿alguien quiere?
-¡¡Nosotros!!-exclamamos Harry y yo a la vez.
Dougie levantó las manos y se perdió en la cocina mientras yo me acomodaba en el suelo, apoyando la cabeza al lado de la mano de Harry, quién empezó a acariciarme la cabeza como si fuera un gatito.
-¿Tengo que hacer "miau"?-inquirí alzando la mirada para verle.
-No, no necesariamente-rió.-¿Prefieres leche en lugar de coca-cola?
-Ja, ja, ja. ¡Qué gracioso!-ironicé dándole una pequeña colleja.
Tom entró justo en ese momento, y nos sonrió, sentandose a mi lado en el suelo, pasó un brazo por mis hombros y me acercó a él, revolviendome el pelo, ¿qué les pasaba con mi pelo?
-Danny no vendrá a cenar ni a comer-explicó Tom encogiéndose de hombros.-Georgia quería llevarselo a cenar a un restaurante italiano que acaban de abrir... Supongo que luego se irán de marcha.
-Mmm... Bien por él-comenté encogiéndome de hombros.-Es decir, es su novia, quiere estar con él, lo veo normal.
-Pues yo no-se quejó Harry desde el sofá-.Ya nos había dicho que vendría con nosotros, y ahora se presenta la... ¿cómo dijiste Natalie?-se quedó pensando.-Ah sí, la muñeca de plástico, medio quilo de maquillaje y medio litro de Laca, y le convence con cuatro tonterías, un par de morreos y no sé qué más...
-Tú harías lo mismo, Judd, no te quejes-defendí a Jones sin habermelo propuesto. Todas las miradas se centraron en mí.-A ver, ¿me vais a decir que no? Bien, Tom. Si Gio te dice que le apetece que vayas a cenar con ella, y tú tienes planes con tus amigos, ¿qué haces?
-La invito a cenar con nosotros-Tom se encogió de hombros como si eso fuese lo más normal.
-Y si quiere que ceneis solos para...-no terminé la frase, los ojos de Tom se abrieron de par en par.
-Ah, entonces eso cambia-rió nerviosamente.-Iría con ella, y todos lo haríamos igual, así que, tienes razón.
Me encogí de hombros dando por zanjada aquella conversación, justo cuando Danny entraba por la puerta acompañado de Georgia.
-Chicos que hoy no me quedo a cenar aquí, y lo más probable es que a dormir tampoco-explicó, y me dí cuenta de que evitaba mirarme.-No os molesta, ¿no?
-No eres indispensable-comentó Harry mirándole, y luego me miró a mí.-Pero lo entendemos. Hoy creo que no te necesitaremos.
-Y mañana tampoco-dije de pronto mirandole, él me miró sin comprender.-Para lo de las clases de guitarra digo.
-Ah, no, no, yo prometí venir a darte clases con Tom y yo...
-No, en serio, Danny-sonreí mirándo a la pareja.-Tom me ayudará, ¿verdad?
-Sí, sí-sonrió Fletcher mirandonos.-Yo sólo me apañaré.
-Ah bueno...-Danny me miró de nuevo y yo desvié la mirada mirando hacia la cocina, por dónde salía Dougie.
-Doug, mi niño, Danny no viene a cenar, a dormir, y mañana tampoco viene a las clases de guitarra... Así que, tocareis a más comida española-reí y Dougie dió pequeños saltitos.
-Ah genial, más para mí-sonrió.-Oí a Aaron decir que estaba muy rico aquello que les diste de cenar.
-Tss, lo sé-reí junto con él y Georgia nos miraba sin entender.
-¿Estáis juntos?
Dougie, Danny y yo la miramos y Dougie y yo acabamos riéndonos.
-No, no-negué con la cabeza.-Es que somos buenos amigos, sólo eso-asentí con la cabeza.-Podeis iros, en serio. Y Danny...
Danny se giró mirandome esperanzado.
-Mañana no hace falta que vengas pronto, ya sabes, tómate el tiempo que quieras, Tom me enseñará-abracé a Fletcher y Danny sonrió de medio lado antes de marcharse por la puerta.
-Bien, pues... Enseñanos que hay que hacer para preparar esa cena taaaan deliciosa-exclamó Harry poniéndose en pie.

14.

"You were fake, I was great NOTHING PERSONAL" - All Time Low "Break your little heart"

14.

-Pon este CD-pedí mientras le pasaba el cd de Nothing Personal de All Time Low. Me apetecía escucharlos.
-¿All Time Low?-inquirió Dougie al ver el cd.
-Sí, necesito escucharles.-Reí y me estiré para cambiar la pista del cd, Lost In Stereo sonando.-Adoro esta canción.
Ellos se encogieron de hombros y me dejaron cantar la canción con tranquilidad, a mi ritmo y ninguno se preocupó por si cantaba mal o no. No sé, me sentía agusto. Estaba genial, así que el rtayecto se me pasó enseguida, fue divertido.
-Lost in stereo, lost in stereo-tarareó Dougie.
-¿Qué haces, Doug?-inquirió Harry mirándole.
-Cantar, alguien tiene que hacer los coros-comentó en el estribillo.
-She dances alone, I'm ready to go but she's so...
-Lost in stereo, lost in stereo-cantó Dougie animado.
Los tres empezamos a reir como bobos, la verdad, es que sí, ellos eran geniales, y me lo pasaba genial. No sé, aunque fuesen una de mis bandas favoritas, empezaba a verles con otros ojos, no eran los chicos famosos que todo el mundo veía en televisión, si no, los amigos que se gastaban bromas entre ellos, me hacían reír y además, me dejaban dormir en su casa sin apenas conocerme. ¿Qué chicos hacían eso? Sí, vale, unos estúpidos o alguien que fuese muy buena persona, y ellos tenían más de lo segundo que de lo primero.
Bajamos del coche y subimos al estudio de grabación, Tom y Danny estaban tomandose un café en el pasillo, cuando entré, Danny sonrió de medio lado y Tom me saludó con la mano. Harry, Dougie y yo caminamos hasta ellos.
-Os traigo una sorpreeeeeesa-dije mientras les daba sus bocadillos.-Para que comais algo, no queremos que os quedeis en los huesos-añadí mientras golpeaba levemente el abdomen de Danny.
-¡Gracias enana!-exclamó Tom besando mi cabeza.-¿Quieres entrar a ver el estudio?
-No, no-sonreí.-Cuando empeceis a grabar entro a veros, pero si no, nada. Ahora comed.
-Yo que vosotros, le haría caso, además, que esos bocadillos tienen una pinta estupenda.
-No se diga más-zanjó Danny mientras desenvolvía su bocadillo.
Yo me senté en unas sillitas de plástico que había por allí y Dougie se sentó a mi lado, pasando un brazo por mis hombros y acercándome a él.
-Bueno, mi niña-empezó sonriendo.-¿Y mañana, qué te va apetecer hacer?
-Pues no lo sé, si te soy sincera quizá me quede en casa intentando terminar de aprender a tocar I'll Be Ok.-expliqué.
-Danny, Tom, ¿os apetece dar unas clases de guitarra mañana?-inquirió Dougie mirando a los chicos.
-¿Clases de guitarra?-preguntó Tom.
-Nat quiere aprender I'll Be Ok. Y seguramente le salga mal, como todas las que sabe de nosotros-sonrió alegre.-Podriais ayudarla.
-Por mi no hay problema, y creo que por Tom tampoco-Danny me miró.-¿Y por tu parte?
-Ninguna-sonreí feliz.-Seguro que si vosotros me enseñais, me saldrá genial.
Ya teníamos planes para el día siguiente. Pasamos un par de horas en el estudio de grabación, sobre las seis o así, volvimos a casa, pero hubo un fallo enorme. Tráfico.
-¿Esto no avanza?-inquirió Danny que estaba sentado atrás conmigo. Tom, Danny y Yo ibamos en el coche de Tom. Harry y Dougie iban en el coche de Harry.
-Bueno, ¿no ves que no?-suspiró Tom mientras se giraba para mirarnos.-Hablad de vuestras cosas, o haced idioteces, pero no me desquicieis, por favor.
-Trato hecho-acepté y me giré de modo que pudiese mirar a Danny a los ojos.-Vamos a hablar de algo.
-¿Quieres hablar de algo?-recalcó la palabra hablar. Yo sólo asentí.-Bien, vale. Haber...
-¿Querias besarme?-dije bajito, quitándome el cinturón, y sentandome en el medio, es decir, a su lado.
-Sí-aceptó Danny mirandome y pasando un brazo por mis hombros.
-¿Por qué?-volví a preguntar.
-Me gustas-respondió él.
-¿Y Georgia?-le miré y él suspiró.
-Eres diferente a todas las que he conocido-explicó.-A ver... Muchas otras habrían saltado a mi cuello, gritando, llorando... No sé. Tú en cambio no. Mira, por ejemplo...
Se acercó a mi rostro, rozó sus labios con los mios, levemente, sin llegar a unirlos, y yo eché mi rostro hacia atrás, alejándome de él.
-¿Lo ves? Te resistes a besarme, niegas que te gusto. Te haces la dura-sonrió y besó mi mejilla.-Eres diferente Natalie, y sé que Dougie también se ha dado cuenta.
Le miré y sonreí levemente, abrumada por todo lo que me había dicho. Acarició mi mejilla y sonrió divertido.
-Pero como tú dijiste, no te vas a enamorar de mí con tanta facilidad, así que...-acercó sus labios a mi oído.-Haré todo lo que esté en mi mano para que yo te guste, tanto como tú me gustas a mí-susurró con tranquilidad.

jueves, 22 de julio de 2010

13.

"Let it roll. Our time is fleeting so we take control". - All Time Low. "Let it roll".

13.


Llegamos a casa de los chicos y Harry se encargó de pedir la pizza, yo apenas tenía hambre así que, preferí comer sólo un par de porciones de pizza y dejé a los chicos comer el resto.
-¿Y qué vamos a hacer esta tarde?-pregunté mientras les veía comer como dos idiotas.
-¿Te parece si... vamos al estudio de grabación, vemos grabar a Tom y a Danny y luego nos vamos a dar una vuelta por ahí los cuatro?-inquirió Harry curioso.
-Por mi perfecto, además, me apetece hablar con Danny-dije en voz alta mirando a Dougie de reojo.
-Si estás segura, vale-aceptó Doug sonriendo.-Ya sabes, cualquier cosa, me lo dices, mi niña.
-¿Mi niña?-inquirí mirándole divertida.
-Sí, mi niña. Vas a ser mi niña. ¿Tienes algún problema con eso?-replicó Poynter sonriendo alegre.
-No, ninguno-reí.
-Así me gusta-besó mi mejilla y continuo comiendo.
Rodé los ojos y conecté la tele, poniendo MTV, donde por sorpresa, pasaban un videoclip de Busted.
-I feel her slipping through my fingers, now she's gone, I'm sleeping with the light on... And shocks went through my veins now, that she's gone, I'm sleeping with the light on-canté bajito sonriendo.
-¿Te gusta Busted?-preguntó Harry mirándome.-Pero si se separaron hace tiempo.
-Eh eh, Busted siempre han sido MUY grandes, y me han marcado MUCHO-recalqué los advervios de cantidad.-Son geniales.
-No sé porque diria nada...-Harry rodó los ojos y volvió a centrarse en comer.
Me quedé pensando un buen rato, la verdad es que sí que Danny me había hecho pensar muchísimas cosas. Y sí, puede que sí quisiera besarlo, pero con su egocentría y su "Sabes que te gusto", terminó por derrumbar toda esa "intención". Es más, él estaba con su maravillosa Georgia, esa de la que tanto hablaba y yo... Bueh, yo no era nadie. Nada más la niñata de la casa de al lado, vamos, la amiguita de Dougie.
-¿Creeis que Danny está enamorado de Georgia?-solté de pronto, casi sin pensarlo.
Dougie se atragantó con el trozo de pizza, y mientras tosía, Harry me miró con los ojos abiertos como platos.
-Dime que no-dijo Judd mirandome impresionado.
-¿Qué? Oh no, oh no-reí y negué con la cabeza.-A mi me gusta Dougie.
-Oh, bueno, me siento alagado-Dougie rió y besó mi mejilla.-Ahora en serio, ¿a qué viene esa pregunta?
-Bueno, por curiosidad. No sé. Me extraña que no la llamen a menudo y que no hable siempre de ella... No sé, es algo raro-me encogí de hombros.
-Danny no es mucho de hablar de sentimientos, no sé si me explico-Harry se quedó pensativo.-Quiero decir, Danny puede estar locamente enamorado de Georgia, pero no mostrarlo, por eso quizá no habla tanto de ella o no la llama.
-"No necesito verte para saber que estás ahí, me basta con cerrar los ojos e imaginarte conmigo"-recordé esa frase, mucha gente la había escrito, muchas veces la había leído, pero nunca había pensado que me serviría.
-Sí, es algo así...-Dougie sonrió y pasó un brazo por mis hombros.-Mi niña, ¿en serio te gusto?
-¡Claro, cielo!-exclamé pasando mis brazos por su cintura y abrazandole.-Me vuelves loca, Doug.
-Oh bueno, Harry ¿podemos usar tu cuarto?-inquirió Dougie bromeando.-Es el que más cerca está de las escaleras.
Le di una pequeña colleja suave a Dougie, y luego esperé a la respuesta que Harry se había quedado meditando y pensando con tranquilidad.
-No, además, tú eres de los que con nada, te pones, así que, me da a mi que no-explicó Harry, lo que se ganó que Dougie le diese una colleja.-Además, tendrías tu cuarto, chico listo.
-Pero es que a Nat le dan miedo los animalitos tan bonitos que tengo allí-explicó a su vez Dougie encogiéndose de hombros.
-Bueh, da igual, porque no pienso subir contigo al dormitorio-sonreí y besé su mejilla.-Prefiero quedarme viendo videos musicales mientras vosotros haceis... no sé...
-Mira, te diré que haremos-Harry sonrió.-Tiraremos las cajas de pizza a la basura, haremos un par de bocadillos para los guitarristas del grupo, y después nos vamos a verles grabar y les damos de comer, así al menos, no se nos mueren por falta de hidratación, ¿no crees?
Yo asentí encantada y acompañé a Harry a la cocina a tirar las cajas de pizza vacías a la papelera, mientras Dougie aprovechaba para darse una ducha rápida.
Después de que Poynter se duchase, Harry se fue a duchar y Dougie le relevó en la cocina, ayudándome a terminar de preparar los bocadillos, los envolvimos en papel brillante (?), y él besó mi cabecita de nuevo.
Harry terminó pronto, así que, en escasos minutos estabamos en el coche de vuelta al estudio de grabación.

martes, 20 de julio de 2010

12.

"Lost in the stereo's sound". - All Time Low. "Lost in Stereo".

12.

Los chicos seguían hablando en el estudio, bueno, todos menos Dougie que estaba conmigo en el pasillo.
-No es preocupante, ¿verdad?-le pregunté mirándole.
Le había contado todo lo que había ocurrido con Danny hacia tan sólo pocas horas. Y él permanecía mirando su vaso de café vacío muy concentrado.
-No. A Danny se le han cruzado los cables-terminó Dougie y sonrió alegre mirándome.-Es sólo que le jode que no vayas detrás de él y ya está.
-Entonces no me preocupo-determiné sonriendo.
-Tranquila, Danny es así. Pero después de que le hayas rechazado, dejará de intentarlo. Esperemos...-suspiró Dougie pasando un brazo por mis hombros y acercándome a él.-No te preocupes.
Yo sólo asentí y seguí hablando con él, por lo visto, él ya había grabado la parte del bajo y Tom quería hacer unas cuantas modificaciones, por lo cual, a él no le necesitaban. Asíque, ahí estábamos nosotros, en el pasillo, hablando como dos idiotas, y riéndonos alegres. Porque sí, Dougie conseguía que yo me olvidase de todo lo malo y disfrutase aunque fuesen por un par de segundos. No sé cómo, ni cuándo, pero Harry salió del estudio de grabación y nos vió en el pasillo.
-Dougie, deja de abrazar a tu novia-comentó una voz detrás de Harry.
Seguramente, fuese el productor, y fuese una broma, pero yo me puse roja como un tomate, otra cosa que odiaba.
-Para ya, Dallas, ¿no ves que la haces ponerse roja?-comentó Harry mientras me revolvía el pelo y se sentaba a mi lado.
-Vale, vale... Traérla al próximo concierto, será divertido-propuso Dallas mientras volvía a entrar en el estudio.
-¿Novios?-inquirí mirándo a Douglas.
-Baah, no le hago caso, y tú no deberías hacerle caso-rió y besó mi cabecita.
-Hemos acabado, bueno, Dougie y yo. ¿Te apetece venir a comer a casa?-inquirió Harry sonriente.-Pago yo la pizza.
-Por mí perfeeeeeecto-dije alargando la "e" lo máximo posible.-Ya sabeis, Aaron seguirá con la otra.
-Ni que te estuviese poniendo los cuernos-Dougie me sacó la lengua.
-Es que soy demasiado para él-dije sacando un poco de mi escaso ego.
-No, si eso ya lo sabíamos-dijeron Harry y Dougie al unísono.
-Estúúúpidos-respondí dandoles una suave colleja a cada uno.-Judd, conducirás tú, ¿no?
-¿Tanto miedo tienes de que conduzca Dougie?
-¡¡Sí!! Está loco-exclamé mirando como Dougie me miraba mal.
-Vale, vale, esta noche, te paso un lagarto por la ventana, ya verás tú qué loco estoy-comentó mientras me agarraba de la cintura y empezaba a hacerme cosquillas.
-Para, para, para-conseguí decir entre carcajadas.-Ya vale, ya vale.
-¿Paro, paro?-inquirió él mirando al cielo mientras seguía haciendome cosquillas.-Naah, no apetece.
Y continuó. Hasta que Harry me separó de él y me llevó al ascensor. Montamos los tres y Harry se puso en medio, para que Dougie no me hiciese más cosquillas.
Cuando llegamos abajo, yo monté casi corriendo en el coche, en la parte de atrás, pero Dougie tenía otros planes, y se montó atrás conmigo, sonriendo de forma perversa. *_*
Harry se sentó y arrancó. Y allí ibamos, Dougie se abalanzó sobre mí y volvió a hacerme cosquillas, Harry nos ignoró y siguió continuando, y yo sólo podía reirme como una idiota.

domingo, 18 de julio de 2010

11.

"Who is your lover? I couldn't tell." - McFly. "Transylvania".

11.

-¿Cuál vemos ahora?-inquirió Danny lanzando un par de palomitas al aire y comiéndoselas.
-Una de miedo... ¿La casa de cera?-propuso Dougie mientras miraba los cds.
-Venga vale...-murmuró Harry mientras cogía otro cojín y se tumbaba totalmente en el suelo al lado de Dougie.
Yo me tapé con otro cojín y me quedé mirando la película, mientras Marvin se tumbaba sobre mi cuello y ronroneaba feliz.
La película daba miedo, y yo sí, era muy miedosa, así que, como veinte minutos después de que esa película empezase, acabé tapandome la cara con el cojín, no sabía como ponerme, así que dejé a Tom el sofá entero y me senté en el suelo. Unos cinco minutos después, Dougie tiró a Danny al suelo, yo me asusté y pegué un salto, mirándoles mal. Danny le cambio el sitio a Dougie y se sentó a mi lado, pasando un brazo por encima de mis hombros y acercándome a él, para que pudiese esconder mi cabeza en su hombro.
-Chad es genial-comentó Dougie comiendo palomitas.-Seguro que él sobrevive, es demasiado listo.
-Y está demasiado bueno-dije mirando la televisión de reojo.
Danny se encogió de hombros y me acercó el bol de palomitas con una mano mientras seguía viendo la película.
-Gracias Dann-agradecí mientras cogía un puñado.
-No hay de qué.... Aunque podrías aflojar las uñas, me estás dejando marca y Georgia se picará mucho si lo ve-comentó encogiéndose de hombros.
Yo reí divertida aunque algo molesta sin saber por qué. Separé las manos de la sudadera de Jones, y estiré el brazo hasta coger un cojín, mientras lo apretaba contra mi cara...
La película o el maratón de películas terminó sobre las diez de la noche. Me levanté y me despedí de los chicos, los cuales se iban a quedar en el salón hasta tarde, muy tarde.
Empecé a subir las escaleras, pero me detuve unos cuantos escalones después de empezar.
-¿Creeis que Natalie está enamorándose de mí?-soltó Danny de pronto.
-Nah-respondió Dougie.-No creo. Quiero decir... ¿Por qué tendría que estarlo?
-Vamos, lo que Dougie quiere decir es, ella sabe que tienes a Georgia, y además, nunca te has preocupado por ella, por muy bien que cantes, y mucho físico que tengas, quizá ella no es como todas esas niñas que van detrás de ti, Daniel-explicó Tom.
-Ella no es como las otras-afirmó Danny.-Quiero decir, si lo fuese, se habría ido mucho antes de aquí, justo cuando nombré a Georgia... Es distinta, sí.
-No-dijo Dougie serio.-Danny, no.
-Se puso molesta cuando nombré a Georgia-exclamó Danny.-Así que, algo tiene que haber.
-Sí, que estabamos viendo una película de miedo-terminó Tom.-En serio, eres muy paranoico.
Rodé los ojos y subí las escaleras del todo, me puse el pijama y me metí en la cama supletoria de la habitación de Danny. Saqué el Ipod de no sé dónde, y me puse a escuchar "All Time Low". No sé cuanto tiempo pasó, sólo que me quedé dormida con la música puesta.
Sobre no sé qué hora, algo o alguien se cayó encima de mi cama, es decir, encima de mí. Parpadeé un par de veces y lentamente me fui acostumbrando a la oscuridad.
-¿Daniel?-susurré mirando al chico que seguía sobre mí.
-Lo siento, me he tropezado y...-se encogió de hombros lentamente mientras intentaba encender la luz para ver algo.
-Quítate de encima, plasta-bufé mientras apoyaba mis manos en su pecho e intentaba alejale de mí.
-No quieres eso-determinó apoyando su frente sobre la mía, aun sin luz.-Y ambos lo sabemos.
-Si no te quitas, te quito yo de una hostia-amenacé mientras volvía a intentar alejarle de mí.-Quítate, no vaya a ser que Georgia se ponga celosa si te ve un ojo morado.
Sí, había dicho Georgia. Y sí, lo había dicho algo molesta, pero no se notó, porque con mi tono de ironía respecto a lo del ojo morado, se disimuló bastante bien.
-No tendría por qué, eso no sería señal de una noche de placer-comentó con una sonrisa ladeada en sus labios.-Natalie, ambos sabemos que no quieres que me quite.
-Ambos sabíamos que eras muy repetitivo, nunca me imaginé que tanto-murmuré mientras le empujaba por última vez, alejándole del todo de mí.-Ahora sí, buenas noches, Jones.
Me giré en la cama y me volví a dormir con tranquilidad.
A la mañana siguiente me desperté antes que todos, sobre las nueve. Me duché, me vestí, y bajé a desayunar. Hice tostadas, y preparé un vaso de leche caliente. Desayuné en absoluto silencio, y con tranquilidad. Me puse a ver la televisión y a eso de las once y media, los chicos o tres de ellos bajaron al salón, ya vestidos y arreglados.
-Nos vamos, Nat. Tú te quedas aquí, que Danny aun está duchandose y si le esperamos, no llegamos-dijo Tom mientras cogía una tostada.-Te vemos luego.
Se despidieron de mí y se marcharon casi corriendo. Yo rodé los ojos y me quedé tumbada en el sofá viendo MTV cuando pasaron el videoclip de "Damned if I do ya (Damned if I don't)" de "All Time Low". Sonreí divertida, y me quedé mirando la televisión a mi rollo. Diez minutos después, Danny bajó al salón, los pantalones vaqueros bajos, la camiseta blanca de la mano, y el pelo empapado. Me miró levemente, y yo no le dí importancia. Tres segundos después, volvía a estar sobre mí, y yo volví a ignorarle, mirando la televisión.
-¿Puedes dejar de ignorarme?-inquirió demasiado cerca de mi rostro.
Giré la cabeza para mirarle, y me lo encontré a escasos centrímetros de mí.
-Dejo de ignorarte si te me quitas de encima, Danny-respondí levantándome y tirándole o al menos, intentandolo. Caminé hasta la puerta principal.-Vamos, Doug nos está esperando en el estudio.
Cuando acaricié el pomo de la puerta, Danny me hizo girarme, de nuevo, cara a cara, mirándonos a los ojos. Solté el aire de golpe y me quedé mirándole, aguantándole su mirada.
-¿Nos vamos?-inquirí mirándole.-¿O vas a volver a tirarte encima de mí?
-Ambos sabemos que te gusta que lo haga-sonrió sensualmente empujándome contra la puerta.-Ambos sabemos que te molesta que esté con Georgia.
Le miré raro y finalmente solté una carcajada mientras le revolvía el pelo con una mano y abría la puerta como podía.
-Creéme, lo que menos me molesta de tí, es que estés saliendo con la tal Georgia esa.
Él sonrió levemente y yo salí de la casa hacia el coche de Danny. Ambos montamos en el coche, él conduciendo, y yo a su lado. Puso la radio, y yo me dediqué a mirar por la ventana intentando adivinar qué planeaba Danny. A lo mejor... No, no podía ser tan mala persona. ¿O sí?
Suspiré y seguí mirándo por la ventana, pasamos por un semáforo donde vendedores de estos de pañuelos se acercaban al coche, Danny puso el seguro y seguimos avanzando. Cuando llegamos al estudio, Danny apagó el motor y se quitó el cinturón, se giró en el asiento y me miró, cuando iba a abrir la puerta del auto, me dí cuenta de que el seguro seguía puesto.
-Danny, abre la puerta, ¿vale?-le pedí suspirando.
Él negó con la cabeza, se acercó a mi rostro, y rozó sus labios con los míos.
-No-determiné y me separé.-No.
-¿No quieres...?
-No. No quiero ser una niña más que se enamore de ti y a la que no vuelvas a hacer ni caso porque tienes a Georgia. No me da la gana. Que tú vayas de rompe corazones por la vida es problema tuyo. No voy a dejar que me enamores como una quinceañera, y luego me digas que no es posible porque tú tienes novia y blablabla-terminé y le miré.-No quiero, Danny. Asúmelo.
Oí el sonidito del seguro quitarse y bajé del coche, esperándole. Él llegó a mi lado, algo más serio de lo habitual y empezamos a entrar en el edificio. Entramos en el ascensor y pulsó el botón del quinto piso.
-Que sepas-empezó.-Que yo sí quería besarte.
Silencio incómodo.
-Pero tienes a Georgia-respondí.
De nuevo, un silencio incómodo llenó el ascensor.
-Tú eres especial-determinó serio.
Otro silencio, odiaba esos silencios desde hacía más o menos tres segundos.
-No lo sabes, no me has prestado atención, no puedes opinar-recriminé.
Silencio roto por el sonidito del ascensor que señalaba que estabamos ya en el segundo piso.
-Tú puedes decir que no te he prestado atención, a lo mejor si lo he hecho y tú no te has enterado-me contradijo él.
Silencio de nuevo.
-No lo intentes-dije segura de mí misma.-Quiero decir, si estás intentando enamorarme porque he sido la única que no he ido detrás de ti, no lo intentes. No soy tan estúpida.
Silencio más largo que los anteriores.
-No lo intento porque seas la única que no ha ido detrás de mí. Porque sé que no eres tan estúpida de dejarte enamorar así, Natalie-respondió él apretando el botón de parada del ascensor.
-Danny, para ya, ¿vale?-le miré.-Te están esperando en el estudio.
-Pueden esperar un poco más-determinó mientras acariciaba mi mejilla y volvíamos a estar en la misma situación que en el automóvil.
-No-repliqué de nuevo y volví a separarme. Pulsé el botón de nuevo y el ascensor volvió a subir.-Deja de intentarlo, Jones. Sabes que no, que dejes de intentarlo. Tienes a Georgia, ¿no? Pues déjame en paz.
Cuando el ascensor se abrió, vi a Dougie en la máquina de café del fondo del pasillo. Salí casi corriendo hacía él y le abracé sonriendo.
-Doug, mi vida-bromeé mientras le quitaba el vaso de café de la mano.-¿Me das un poco?
-¡Claro, pequeña, bebe!-rió y pasó un brazo por mis hombros mientras besaba mi cabeza.-Danny, Tom te está esperando.
Danny asintió, serio de nuevo, y entró en la sala de grabación mientras yo me quedaba con Dougie en el pasillo hablando de tonterías. Él conseguía que yo olvidase lo que había ocurrido con Danny.

sábado, 17 de julio de 2010

10.

"'Cause everytime I close my eyes, I'm not alone." - McFly. "Down Goes Another One".

10.

-¿Te gustan?-preguntó Dougie mientras Danny y él metían la cama supletoria en el dormitorio.
-Ya le he dicho a Dougie que no hacia falta otra cama, que en la mía podiamos dormir los dos-bromeó Danny divertido.
-Antes duermo con Harry-rodé los ojos y me encogí de hombros mientras miraba otra estantería llena de cds.-Room on the third floor.
Tomé el cd y fui a la mini-cadena, lo puse y me senté en la cama supletoria, con Dougie y con Danny.
-¿Te gusta?-inquirió mirándome Danny.
-Oh, sí. Me encanta este cd-sonreí y Dougie me revolvió el pelo.-¿Me quereis explicar que le pasa a todo el mundo con mi pelo?
Me lo coloqué bien como pude con las manos, y le dí una pequeña colleja a Dougie, él miró a Danny, Danny le miró. Ambos me miraron. En tres segundos estaba riendome como una loca, mientras ellos dos me hacían cosquillas. Pataleé y conseguí tirarles de la cama mientras seguía riéndome. Cuando los tres nos calmamos nos volvimos a sentar en la cama, mientras hablabamos de cosas sin sentido.
-Vale, me toca preguntar-tarareó Danny sonriente.-¿Te gusta Dougie?
Doug y yo nos miramos, miramos a Danny, nos volvimos a mirar, y acabamos riéndonos como dos tontos.
-Qué si me gusta el chico lagarto, dice-seguí riendo divertida, cuando más o menos, me calmé intenté no volver a reirme.-Es mono, y guapo, y estaba mucho más sexy con el piercing-reconocí.-Y si hablamos de gustar en un modo físico, está bueno y eso, pero gustar de querer más allá que como amigos, no.
-Mmm Dougie, te han dado calabazas-comentó Danny acariciandole la cabeza.-Pobrecito.
-Nah, no pasa nada, Dann, yo te tengo a ti para que apagues mi fuego interior-comentó Dougie abrazándole y guiñándole un ojo.
-Esperad, esperad, que me voy y os dejo solos-reí y salí de allí casi corriendo escaleras abajo.
Se podía oír la televisión desde las escaleras, así que, supuse que alguno de los otros dos estarían allí. No me equivoqué, al entrar al salón vi a Tom, con Marvin encima.
-¡Tommy, Marvin!-saludé tumbándome en el sofá, y apoyando mi cabeza en el regazo de Tom, mientras estiraba el brazo para acariciar a Marvin, que saltó de las piernas de Tom para ponerse sobre mi tripa.-Que mono es.
-No me lo robes, Nat-se quejó Tom sonriendo.-Que luego no hay quien consiga sacartelo de encima.
-No hay problema, Marvin te quiere casi tanto como yo-comenté divertida mientras le acariciaba detrás de las orejitas.
-Bueno, ¿me quieres más que Marvin?-me miró sonriendo y me revolvió el pelo. ¿Cuántas veces iban ya?
-¡Sí!-reí.-Gracias por dejarme quedarme a dormir aquí, es que Aaron quería usar la casa de picadero, y yo no sabía muy bien a donde ir... Hasta pensé irme a un hotel.
-¿Tú estás boba? Pero si eres como una prima para mí. Además, eres mi futura hija adoptiva, recuérdalo-ambos reímos.-Asi que, no te preocupes.
-Al final no duermo con Dougie, me dan miedo tantos lagartos por ahí sueltos... Duermo con Danny, es decir, en su cuarto, pero en otra cama, no pienses mal, eh.
-Eh eh eh, que no he pensado mal, jobar, que eso es cosa de Dougie y de Danny...-dejó la frase sin terminar.
-¿Y Judd? Hoy no le he visto... ¿Tan cansado le has dejado de la noche anterior?-le miré levantando las cejas divertida, y él me miró unos instantes antes de hacerme cosquillas.
-¡¡No digas esas cosas, que Jones se pone celoso!!-exclamó Tom sin parar.
-Él está liado con Poynter, jopé Fletcher, pensé que eras más listo-le miré mal pero luego le sonreí.-Así que... ¿Mañana estudio de grabación?
-Sí, vas a ver la cantidad de cosas que hacemos allí. Grabamos aquí unas cuantas maquetas, y luego las mandamos a Australia para que Dallas les eche un vistazo. Si están bien, vamos a Australia a grabarlas bien, si no, repetimos aquí hasta que se consiga algo más o menos normal-explicó.
-Oh, genial, yo de mayor quiero trabajar en vuestra discográfica-comenté como ida.-Iba a ser genial.
-Puedes pensártelo-propuso.-Mira, incluso en Agosto si quieres, que vamos a ir todo el mes a Australia, podrías venirte y hacías prácticas allí. Yo te pagaría todo.
-¡No es necesario, Tom!-exclamé.-No quiero fastidiaros el verano, ni que os gastéis dinero en mí. ¿Vale?
-A ver, enana, te repito, eres mi futura hija adoptiva, Harry y Judd te pagaremos todo lo necesario, ¿vale? Ahora... ¿Te parece si hacemos maratón de películas?-propuso sonriendo.
-¡¡Exactamente lo que estaba pensando!!-dije divertida.-Judd, Poynter, Jones, ¡¡bajad!! ¡¡Vamos a ver una peli!!
Fue visto y no visto, de pronto, todos los chicos estaban en el salón, sentados por el suelo, mientras Dougie fue casi corriendo a hacer palomitas, y al volver, dejó sobre la mesa dos cuencos de palomitas. Tom alcanzó uno, y lo sujetó él, porque Marvin se quedó dormido sobre mí.
Y ahí estabamos, los cinco, haciendo un maratón de películas que quizá, nunca habría visto.

viernes, 16 de julio de 2010

9.

"I got your picture, I'm coming with you." All Time Low. "Dear Maria, Count me in".

9.

Dos días después, bueno, la verdad es que hacía dos días que no veía a los chicos porque estaban en el estudio de grabación. Así que, había estado esos dos días con Eric, Derek y Aaron. Vale que no eran los chicos, pero sí, me lo pasaba genial con ellos y me habían llevado por toda la urbanización, incluso de nuevo, había subido al London Eye, con ellos, fue divertido ver como saltaban de un lado a otro como si fueran canguros.
Llamaron a la puerta y gateé por la cama hasta llegar a la puerta, la abrí y miré a ver quién era. Aaron estaba delante de la puerta con una guitarra. Yo le miré con los ojos abiertos, y él entró casi sonriendo. La dejó encima de la cama con una funda de guitarra. Le miré sin entender y él me revolvió el pelo.
-He convencido a mis padres de que me diesen algo más de dinero, quería hacerte un regalo-rió alegre.-Sé que te gusta mucho la guitarra, porque veo como la miras cuando la ves en mi cuarto, así que te he comprado una.
Miré la guitarra acústica con los ojos abiertos y después me lancé sobre él abrazándole.
-Gracias, gracias, gracias-exclamé feliz.
-Vale, espera-se separó y se rió de nuevo.-Tienes un afinador, seis cuerdas de repuesto, puas, cejilla...
Sonreí de nuevo, con alegría, feliz, y de nuevo le abracé. Él respondió al abrazo, y cuando nos separamos, le miré encarnando una ceja y él suspiró.
-Mamá y papá se van de viaje esta tarde, y pues... ¿Podrías dejarme la casa para mí sólo esta noche?-inquirió algo avergonzado.
-Nombre, edad, ¿dónde vive?-pregunté rápidamente intentando aguantarme la risa.
-Sally. Diecisiete. Es la vecina de la casa quince...-se rió nervioso.-¿Eso es un sí?
-Sí, sí. Si consigo casa, sí-reí.-Así que, esta tarde, te llamo.
-Genial, genial-besó mi mejilla.-Gracias, pequeña.
Rodé los ojos cuando se fue, cogí ropa limpia y me fui a duchar casi corriendo. Me ricé el pelo y me hice un recogido fácil y simple. Después volví corriendo a la habitación, puse el reproductor de música a tope y cogí la guitarra y la funda. Salí por la ventana, puse la funda en el techo y me senté encima, evitando aplastar las cosas. Empecé a tocar "I'll be Ok". Había aprendido los acordes por internet, y sonaba genial, más que genial.
-When everything is going wrong and things are just a little strange, it's been so long now, you've forgotten how to smile...-canté levemente, mientras tocaba.
Era relajante estar ahí afuera. Oí como una ventana se abría, así que, paré de tocar y miré hacia la casa de los chicos, para ver a Dougie allí parado mirándome sonriendo.
-¿Buenos días?-inquirió mirando mi guitarra con curiosidad.
-Me la ha regalado Aaron-expliqué y sonreí.-A cambio de que duerma fuera de casa esta noche.
-¿Ah? Genial, prepararé la cama supletoria y mañana te vienes con nosotros al estudio de grabación-determinó con tranquilidad.-Y no, no puedes decir que no.
Yo solo reí divertida y me encogí de hombros, y estuve un rato más hablando con él, el tiempo necesario para que me dijese que me fuese después de comer con ellos, así que, yo acepté. Me metí en casa y guardé la guitarra, después fui a la habitación de Aaron, quién estaba hablando por teléfono y lo tapó con la mano mientras me preguntaba si podía traer a la tal Sally a casa, y cuando le dije que sí, él cogió su teléfono de nuevo y comenzó a decirle hora y lugar y yo decidí irme de nuevo a mi cuarto. Empecé a preparar una mini-mochila con el pijama, la ropa para el día siguiente, y demás cosas. Después, puse a cargar el móvil, y fui cambiando la canción que tenía en el reproductor de música, mientras me dedicaba a navegar por internet, twitter, tumblr, no sé, todas las páginas que se me ocurrían, la verdad es que no me preocupaba demasiado, tenía la casa para mí sóla desde la una del mediodía porque Aaron se iba a comer con Eric, John y Margaret se iban de viaje, y yo no tenía demasiadas cosas que hacer.
Sobre la una menos cuarto del mediodía, cogí el portatil y bajé a la cocina, me preparé un sandwich y una ensalada, total, no tenía demasiada hambre y la ensalada me encantaba. Comí con tranquilidad, mientras que Bobby perseguía a Light, la gatita que no se quedaba quieta ni un sólo segundo. Yo sólo sonreía divertida cuando los veía pelear, porque siempre acaban igual, Bobby le lamía la cara, y la gata le empujaba con las patitas para quitarselo de encima.
Comer sóla en la cocina no era divertido, pero tenía la casa para mí sola, así que ese era el punto bueno de la situación. Cuando terminé, lavé los platos y subí de nuevo con el portatil a la habitación, eran las dos y media, me había tomado demasiado tiempo comiendo, y bueno, ahora podía recoger todo el cuarto, hasta las tres y luego me iba con los chicos.
Seguí con la música a tope, recogí con tranquilidad, y a las tres, cogí el móvil, apagué el ordenador y cogí la mochila. Bajé las escaleras de dos en dos, cómo era normal en mí y salí de la casa. Sólo esperaba que Aaron se lo pasase bien aquella noche, llamé a la puerta de los chicos y Dougie me abrió, me abrazó y casi me arrastró hasta el interior de la casa.
-¡¡Chicos, la de la ventana ha llegado!!-gritó mirando hacia las escaleras.
-Genial, pues enseñalé su cuarto-gritó Tom desde el piso superior.
Dougie me tendió la mano, divertido, y me guió escaleras arriba. Todo el pasillo recto, y la última habitación. Cuándo la abrió me tapé los ojos.
-Doug, ¿lagartos?-murmuré mirándo las jaulas atontadas.-¿Y duermes aquí?
-Son preciosos, ¿a qué sí?-dijo el chico abobado.-¿Te da miedo?
-No me siento muy segura durmiendo con lagartos-expliqué mirando las jaulas.-¿La habitación más cercana a esta?
-Danny, la puerta de al lado-indicó Dougie.-¿Quieres dormir allí?
-Si es posible...-reí levemente.-No, tranquilo. Duermo aquí.
-Oye, no seas boba. Si te da miedo duermes con Daniel y ya-exclamó divertido. Esta vez, me arrastró hasta la puerta del dormitorio de Danny y llamó a la puerta.
-¿Qué quieres, Douglas?-inquirió Danny abriendo la puerta, de nuevo, sin camiseta.-Ah, hola Nat.
-Buenas tardes-saludé divertida.
-Danny, cariño-murmuró Dougie con voz acaramelada.-A Nat le da miedo dormir con los lagartos... ¿Crees que puedes cambiarle el cuarto?
-Mmm que duerma conmigo, no muerdo-me miró y luego miró a Dougie.
-Creo que me da más miedo dormir con Danny que con los lagartos-bromeé y ante la mirada de Daniel reí.-No, no. Es broma, es broma. Si a Dann no le importa...
-No, no, no importa-sonrió y me revolvió el pelo.-Dougie, trae la cama de tu cuarto anda.
-Vale, ¿has hecho limpieza?-inquirió antes de ir a su cuarto.
-¡Sí! Tom lo exigió esta mañana-rió Danny y me abrió la puerta, dejandome pasar.
La habitación de Danny no estaba desordenada, ni hecha un asco. Pero sí que había algo de ropa por encima del escritorio y de la cama. Parecía que Danny estaba mirando que ponerse cuando yo llegué. Reí divertida y me dediqué a mirar los cd's que tenía. Bruce Springteen, The Who...

jueves, 15 de julio de 2010

8.

"If you fall strumble down, I'll pick you up of the ground." Simple Plan. "Save You".

8.

Cuando bajamos de la noria, Danny empezó a hacer el idiota, y yo acabé riéndome como una tonta. Él me pasó un brazo por los hombros, y se negó a separarse. Caminamos hasta los chicos y esperamos a que terminasen de hablar.
-Me apetece un algodón de azúcar-comentó Dougie mirándome divertido.-¿Te apuntas, Nat?
-Si pagas tú...-reí mientras me liberaba del abrazo de Danny y me iba con Dougie a por un algodón de azúcar.
El señorito Poynter, compró un algodón de azúcar de los grandes, pagó él y me dió un trocito pequeño, para que probase.
-Dulce, muy dulce-sonreí mientras le quitaba el algodón de las manos.
Eché a correr hacia los chicos, con Dougie persiguiendome, me escondí detrás de Harry, y noté como Tom miraba en mi dirección.
-¡¡Me ha quitado el algodón de azúcar!!-exclamó Dougie enfadado.
-Dijiste que la invitabas, así que, ¡no toques a mi prima!-amenazó Harry en un tono divertido.
-Uh qué miedo, Mr. Poynter se enfada-comenté asomándome por un costado de Harry.
-Dame al menos un poco, porfa-suplicó y me tendió la mano.
-Está bien-agarré su mano y Dougie tiró de mí hasta tenerme a su lado.-Lo sujeto yo y comemos ambos.
-Trato hecho!-sonrió y cogió un trozo de algodón llevándoselo a la boca.
Seguimos caminando por Londres, los cinco, como si nos conocíesemos de toda la vida, entre bromas, comentarios algo salidos de tono, y muchas fans rodeando a los chicos y pidiéndoles autógrafos.
En esos momentos, yo me separaba y les dejaba estar con ellas, porque yo también me sentiría así si conociese a mis ídolos. Realmente, había conocido a cuatro de mis idolos, pero si me volvía loca parecería otra fan más y aunque fuese eso, quería que ellos viesen mi verdadero yo, y no a Nat, la fan de McFly.
Quizá resultaba algo complicado de entender, pero yo sabía muy bien que las apariencias engañan, me había pasado más de una vez, por ejemplo, con Aaron, quién ni si quiera había sido borde y desagradable conmigo, pero yo le había tachado de ello sin conocerle.
Aaron era una persona misteriosa a primera vista, tenía gustos de música comunes, aficiones comunes y amigos comunes. Le hacía especial la manera que tenía de encerrarse en si mismo cuando conocía a alguien nuevo, o la facilidad que tenía para que otras personas tuviesen sorpresas que él ya sabía desde hacía mucho tiempo.
Supongo que yo no era muy diferente a todas las chicas del mundo. Adoraba la música, la escritura, las fotos, las compras, los frapuccinos y los amigos. Adoraba tocar, nadar, jugar, saltar, reír, sonreír. Adoraba ser feliz y odiaba estar triste. Solía desahogarme escuchando mi música favorita, aquella que sabía, me haría feliz sólo con escuchar los primero acordes de una guitarra. Cuando necesitaba despejarme, solía pasear, o disfrutar del aire, o tumbarme en el suelo de mi cuarto, con los cascos puestos y la música sonando. Adoraba ver películas de las cuales, me sabía el diálogo entero, y adoraba ver a los animales ir de un lado a otro. Supongo que mi trabajo favorito, siempre habría sido ser veterinaria, pero cuando empecé a cantar en mi cuarto, o cuando empecé a tocar la guitarra sentía que eso realmente me llenaba.
No recordaba cuanto tiempo llevabamos parados frente al coche de Tom, mientras ellos hablaban de cosas sin sentido para mí y yo seguía pensando en mis tonterías.
Dougie me dio una colleja, y yo le miré mal, y se la devolví. Él me abrazó por detrás y empezó a hacerme cosquillas mientras yo reía como una idiota. Finalmente, diez minutos después entramos en el coche, otra vez sentados igual.
Tom conduciendo, Harry a su lado. Detrás, Danny, Dougie y entre medias de ellos, yo. Y de nuevo, LastFM sonando a todo volumen, esta vez, pasaban "Weightless" de All Time Low. Y sí, me la sabía de memoria, es más, era una canción que me animaba a seguir adelante cuando no podía conmigo misma.
-Maybe it's not my weekend, but it's gonna be my year. And I'm so sick of watching while the minutes pass as I go nowhere. And this is my reaction to everything I fear. 'Cause I've been going crazy I don't wanna waste another minute here-tarareé más para mí que para alguien más.
La verdad es que había sido un gran día, un día enorme, maravilloso, espléndido, con uno de mis grupos favoritos. Y eso no podría superarlo nadie, pensaba. Cuando llegamos a nuestras respectivas casas, me despedí de los chicos con una sonrisa en mis labios, les di dos besos a cada uno y Dougie se despidió con el típico "hablamos". Pero antes de que me marchase, Danny me agarró de la muñeca con suavidad.
-Danos tu teléfono, anda. No vaya a ser que algún día te pierdas...-rió.
Intercambiamos los móviles, yo recibí cuatro móviles mientras el mio iba pasando de mano en mano, y cuando llegó a mí de nuevo, vi que los números estaban guardados como "Tom F." "Harry J." "Danny J." y "Dougie P."
-Es que no sabíamos como ponerlos-se excusó Tom sonriendo.-Luego puedes cambiarlos, señorita "Natalie T."
Le miré mal cuando se burló, pero no podía enfadarme con él, así que me despedí de todos de nuevo y entré a la casa de los Carter. Bobby me recibió ladrando feliz, y pude oír la música procedente del dormitorio de Aaron, así que pasé a saludar.
Llamé a la puerta y Eric me abrió invitandome a pasar, cosa a la cual me negué y sólo me asomé un poco por la puerta.
-Buenas tardes chicos, voy a ducharme, ¿vale Aaron?-él asintió y yo continué.-Luego vengo a ver qué estáis tramando.
Les guiñé un ojo antes de ir a mi cuarto. Busqué el pijama y lo que necesitaba y me fuí a duchar. Me duché con agua caliente, aunque no lo aparentase, tenía los músculos entumecidos de tanto viento frío y por culpa del sol, que por mucho que estuviese en el cielo, no calentaba nada.
Me sequé el pelo, y me di un protector especial para el calor de las plachas, después, me pasé las planchas. Recogí el cuarto de baño y fuí al dormitorio de Aaron a ver qué hacían los chicos.
No me sorprendió para nada verles jugar a un juego de ordenador, así que les dejé a su ritmo y me fui a mi cuarto, a la ventana.
Dougie y Danny estaban allí, haciendo una guerra de almohadas. Les miré raro y les silvé para llamar su atención. Ellos pararon y me saludaron con la mano antes de volver a pegarse con las almohadas. Rodé los ojos y fui a la habitación de Aaron otra vez.
-Hoy hago yo la cena-avisé.-Eric, Derek, ¿os vais a quedar a cenar?
-Suponemos que sí-dijeron.-Así que, ¿qué vas a hacer?
-Tortilla Española, es decir, Tortilla de patata-les guiñé un ojo.-¿Quereis aprender a cocinar?
Ellos asintieron y los tres bajaron detrás de mí a ayudarme a preparar la cena.
Después de cenar no hicimos demasiado, yo me subí a mi cuarto y estuve hablando con el vecino, es decir con Dougie Poynter, mientras que Danny Jones, que estaba a su lado, comentaba tonterías respecto a nuestra conversación.
-Dale una colleja de mi parte-sonreí mirando a Dougie.-Buenas noches chicos.
Cerré la ventana antes de que les diese tiempo a replicar y me fui a acostar.C

7.

"Somewhere over the rainbow skies are blue and dreams that you dare to dream really do come true..." Frank Sinatra. "Somewhere over the rainbow".

7.

Ibamos caminando por Londres, yo feliz con mi frapuccino de chocolate que Harry Judd me había comprado. Sonreí, parecía una niña pequeña en un circo recién instalado. Me dejé llevar por ellos, me llevaron a sitios increíbles, pero la verdad es que era precioso. Muchas fans se acercaron a pedir un autógrafo y los chicos se los dieron sonrientes. Eran muy simpáticos y agradables con las fans, y me sentí orgullosa de ser fan de ellos.
-¿Está rico?-inquirió Dougie mirándome divertido.
-Ten, prueba-le tendí el frapuccino.
-Mmm ¿Adicta al chocolate?-rió Doug alegre.-Está muy rico.
Yo sólo sonreí y volví a caminar a su lado, aunque un par de pasos por detrás, para que las fans no me asesinasen si me veían con ellos. Pero Danny pareció darse cuenta, porque se paró en un momento determinado, mientras los chicos siguieron andando, cuando le alcancé, pasó un brazo por mis hombros y sonrió.
-¿Intentas evitarnos, niña?-inquirió divertido.
-Prefiero mantener mi vida a salvo-le miré y luego miré su mano sobre mi hombro.
-Lo siento, lo siento-rió retirando su brazo.-¿Cómo es eso de que quieres mantener tu vida a salvo? ¿Tanto te cuesta respirar cuando estás a mi lado?
Reí divertida y golpeé levemente su brazo con mi codo, antes de volver a beber por la cañita del frapuccino. Danny siguió preguntandome cosas estúpidas, hasta que ya le empujé y le obligué a irse con los chicos. Suspiré y rodé los ojos, era tan estúpido y gracioso...
Volví a beber frapuccino, rico, muy rico. Sonreí divertida y me apresuré a ir con los chicos. Tiré el bote vacío del frapuccino en una papelera cercana y me puse al lado de Dougie, entre medias de él y de Harry.
-Vale, ya se lo ha terminado-comentó Dougie revolviendome el pelo.
-¡Oye, chico lagarto, controla!-exclamé mirandole mal.
-Uh Dougie...-murmuraron Harry, Danny y Tom a la vez, aguantándose la risa.
-Bah, yo no soy una catwoman que se sienta en los tejados-me sacó la lengua divertido.
-¿Sabes algo?-le miré de arriba abajo y sonreí.-No estás tan bueno como dicen las fans.
Le guiñé un ojo y continuamos andando, mientras los otros tres chicos se reían. Era divertido estar con ellos por Londres. Fuimos a un montó de sitios, pero lo mejor fue el London Eye, bueno, por el momento era lo mejor. La noria enorme, girando y girando, y las cabinas de cristal, seguramente Londres desde allí arriba se vería genial, y yo me moría de ganas de verlo. Dougie y Harry parecían bobos hablando con Tom sobre ardillas, sí, chicas, ardillas.
Agarré de la mano a Danny y tiré de él. Jones se giró asustado y me miró, curioso.
-Noria. Tú y yo. Noria. ¡¡Vamos!!-volví a tirar de él impaciente.
-Vale, vale-rió y echó a correr, esta vez, tirando él de mí.
No sé como lo consiguió, pero entramos en una cabina nosotros dos solos. Sonreí y me moví hacia el cristal, mirando através. El big ben se veía espléndido allí, a lo lejos. El río reflejaba el azul del cielo, y el sol en lo alto, a pesar de todo, era un día soleado, pero no hacía calor, el viento que soplaba lo impedía, y se notaba que hacía viento, porque la cabina se balanceaba lentamente, y tanto Danny como yo lo notamos.
-Me parece que ha sido una mala idea...-comentó preocupado caminando hacia mí.
-No, no lo ha sido-me giré para mirarle y sonreí.-A mi me gusta estar aquí arriba.
-¿Por qué?-inquirió mirandome a los ojos.
-Áquí arriba me siento libre-reí.-No sé, verles a todos tan pequeñitos, me hace recordar que a pesar de todo, soy importante para la gente que me aprecia, y eso me hacer quitarme de la cabeza esas tonterías.
-Pues sí, es una buena razón para subir hasta aquí arriba-sonrió a su vez y me revolvió el pelo.-Eres una enana, ¿lo sabías?
-Y tú un creído-le recordé sacándole la lengua.-Así que no hables, que por mucha cría que esté hecha, molo más que tú.
Él se rió divertido y se encogió de hombros pronunciando un " No pienso discutir eso", y ambos seguimos viendo el paisaje, que a pesar de ser el mismo de siempre, desde ahí arriba, se veía todo de una forma diferente.
-¿Puedo preguntarte algo?-inquirió cuando la cabina se detuvo en lo más alto del recorrido.
-Claro, adelante-sonreí y le miré esperando su pregunta.
-Dime una canción que te haya marcado, mucho-me miró aguantando mi mirada.
-Seguramente la conozcas-sonreí divertida.
-Sorprendeme...-me propuso.
-I'm just following the road, for a walk in the sun-murmuré mirando el sol.-Cuando estaba triste, o cuando necesitaba sonreí levemente... Siempre me ha ayudado, porque se parece mucho a mí esa canción.
-¿Ah sí?-sonrió.-¿Una canción para sonreír?
-When you see my face hope it gives you hell, hope it gives you hell-tarareé de nuevo riéndome.
-Buena elección. A ver, que continuo... ¿Una canción para llorar?-me miró esperando una respuesta.
-Save you. Simple Plan-reconocí sonriendo levemente.
-Una canción para animarte, ¿dime?-sonrió divertido.
-Surfer Babe-sonreí divertida.
-Mmm así que, Surfer Babe-rió divertido.-¿Y Party Girl?
-Bueno, Party Girl podría bailarla a todas horas.
La noria volvió a girar y nuestra cabina fue acercándose al suelo.

6.

"Just remember to smile, smile, smile and turn the world around." McFly. "Smile"

6.

La mañana pasó sin ningún problema, y me apresuré a vestirme, la camiseta de la Selección Española, con el número 10 y el nombre de Fábregas en la espalda. Unos pitillos grises y mis convers favoritas. Me peiné dejándome el pelo suelto, y me puse mis raybans (las típicas raybans cuadradas que son negras) a modo de diadema. Cogí el móvil y la cartera, y una cazadora negra. Bajé las escaleras de dos en dos y fui a la cocina, donde estaban John, Margaret y Aaron hablando de un viaje que debían hacer de un par de días.
-Buenas tardes-saludé y les dí dos besos a cada uno.-He quedado con los vecinos para ir a dar una vuelta, ¿os parece bien?
-¿Ah, ya les conoces?-John sonrió.-Está bien, puedes irte. Aaron, ¿no quieres acompañarla?
-No, papá. He quedado con Eric y con Derek para echar una partida a la playstation-sonrió y me revolvió el pelo.-Además, seguro que ella se lo va a pasar bien.
-Sí, genial, gracias-le revolví el pelo y besé su mejilla, después me despedí de John y de Margaret.
Salí por la puerta con una sonrisa, miré el reloj, las cuatro y veinte. No importa, esperaría. Llamé a la puerta, y un Danny Jones despeinado y sin camiseta me abrió la puerta.
-¿Puedes abrir la puerta con camiseta?-inquirí mirándole de arriba abajo.
-¿A caso te molesta?-contraatacó divertido.
-Sí, después el psicólogo tendrá que escuchar el trauma que me has causado-le saqué la lengua y le empujé lentamente hacia el interior.-¿Y Dougie?
-Vistíendose-respondió Danny.-Harry está en el salón, y Tom en la cocina fregando los platos-se encogió de hombros.
-Guay, voy con Judd, te veo luego, Mr. Poker-reí y entré en el salón.
Harry estaba haciendo zapping, sonreí y le saludé besando su mejilla. Él me saludó con una sonrisa, luego fui hacia la cocina, dónde Tom estaba fregando los platos.
-¡Te ayudo, SuperFletcher!-exclamé mientras le abrazaba.
-Encantado, SuperNat-bromeó mientras besaba mi mejilla.
Le ayudé a fregar los platos, y acabamos antes de lo planeado, entonces, volvimos al salón y nos sentamos allí, esperando a Dougie y a Danny, que ellos sí que tardaban.
-Harry... No es por decepcionarte ni nada, pero creo que Dougie te está poniendo los cuernos con Danny, tanto Streapoker y que tarden tanto en vestirse no es bueno...-bromeé mirándole divertida.
-Bueno, entonces Tom y yo te adoptaremos como nuestra hija... ¿Los homosexuales pueden adoptar?-inquirió Harry mirándo a Fletcher.
-No sé, me da igual, yo convenceré a Gio para que se haga pasar por mi novia de nuevo, y adoptamos a Nat-propuso Tom mirando a Harry.-¿Te parece buena idea amor mío?
-¡Perfecta, Natalie Fletcher Judd! Queda precioso-bromeó Harry con voz de chica.
Yo no pude evitar reirme, y por lo visto, les contagié mi risa a ellos dos, y los tres empezamos a reírnos como tontos.
-¿Disculpad? ¿Nos hemos perdido algo?-inquirió Dougie apareciendo por la puerta.
-Un par de cosas, nada importante-sonrió Tom levantandose y ayudandome a levantarme.-Vámonos y conduzco yo.
-¡Me pido adelante-exclamé riendo y yendo detrás de Tom.
-No, Nat, no. Delante yo, ¿vale?-me pidió Harry mirandome divertido.
-Si luego me invitas a un frapuccino-convencí.
-Trato echo, vámonos-Dougie me empujó rumbo al coche.
Nos montamos en el coche, yo entre medias de Dougie y Danny, rumbo a Londres, la verdad es que el trayecto fue divertido, LastFm sonando a todo volumen en el coche, Dougie, Danny, Tom y Harry cantando como auténticos locos, mientras yo me reía sin parar, no cantaban bien, quiero decir, lo hacían para hacerme reír, y lo conseguían. Pero cuando Tom empezó a cantar bien, Dougie y Harry se callaron, pero Danny siguió cantando, así que, yo le tapé la boca a Danny y me quedé escuchando a Tom cantar "Let it be".
Sonreí y aplaudí cuando acabó.
-Adoro a Tom Fletcher-dije en voz alta, sonriendo como una niña pequeña.-Cambia de emisora, ¿Demand quizá?
Tom asintió con la cabeza y puso la radió, y justo empezó a sonar Party Girl. Sonreí de nuevo, quedaba poco para llegar a Londres, pero esa canción me encantaba.
-But if looks could kill then we all would be doomed-canté divertida.
Danny me miró sonriendo y se unió a cantar conmigo. Pero cuando el verso de Tom llegué, miré a Danny y él me entendió a la perfección porque Tom entonó su verso perfectamente.
-I love this little party girl-tarareé feliz.
Aparcó el coche cerca de un Starbucks y Harry y Danny bajaron los primeros, yo bajé casi corriendo, cogí a Harry de la mano y le arrastré hasta el Starbucks, él simplemente resopló y negó con la cabeza.